Necesitarás amigos

Modo Batalla
Está claro que para jugar solo quizá Bomberman no sea el título más apropiado para Nintendo DS, pero es que la verdadera salsa de este reciente lanzamiento y la razón por la que para muchos puede merecer la pena es el Modo Batalla para hasta ocho jugadores. Utilizando la eficaz descarga de datos de Nintendo DS, el anfitrión y poseedor del cartucho original puede descargar los datos necesarios en el resto de consolas y en apenas 20 segundos. El hecho de necesitar sólo una copia para el multijugador es un gran acierto por parte de Hudson ya que así habrá muchas más posibilidades de poder rodearse de gente para poner unas bombas juntos.

Entrando en detalles jugables, el Modo Batalla está formado por una treintena de modalidades distintas, todas ellas modificaciones de alguna de las siguientes variantes principales:

- Normal: El todos contra todos de toda la vida donde el campeón es el último en quedar con vida sobre el escenario.
- De Paneles: Las explosiones de nuestras bombas colorean el suelo, el que más haya pintado de su color al acabar el tiempo gana la partida.
- Corona: En esta ocasión el vencedor es el que atrapa la corona que hay en el escenario antes que nadie.

En base a estas tres opciones de juego distintas se han ideado una gran cantidad de modalidades, a cada cual más divertida. Tenemos la posibilidad de disfrutar de una partida clásica con los ítems de toda la vida, jugar con todos los objetos convertidos en calaveras de enfermedades o interrogaciones con contenido sorpresa, también podemos pelear por la corona en una pantalla con cintas transportadoras que nos llevan de un lado para otro, o probar a utilizar las variantes de voz, en las que por ejemplo las bombas se denotan haciendo uso del micrófono, ya sea soplando o hablando. Pero hay mucho más: un modo en el que el paso entre la pantalla superior y la inferior sólo se puede realizar por un túnel (lugar perfecto para emboscadas), otro en el que hay trampolines que nos pueden lanzar fuera del terreno de juego, uno con decenas de objetos al descubierto por los que pelear o una opción en la que los ocho jugadores tienen que verse la cara en una alocada mêlée por la supervivencia en una sola pantalla. Hay para todos los gustos y cuantos más jugadores sean humanos mejor, aunque también se pueden completar las plazas libres con bots.

Las opciones no acaban ahí. Al configurar cada partida podemos agruparnos por equipos (sube mucho el componente estratégico), activar la muerte súbita para que cuando quede poco tiempo el tablero comience a hacerse más pequeño a un ritmo vertiginoso, o decidir si queremos o no venganza, que es ni más ni menos la posibilidad de que los participantes muertos puedan lanzar bombas dentro del terreno de juego para molestar y, en caso de tener la fortuna de matar a alguien, volver a participar. Por supuesto, se puede ajustar la duración de cada ronda y el número de veces que hay que ganar para alcanzar el puesto número uno del podio final.

Son tantas las variantes que tardarás días en disfrutarlas todas a fondo. No necesitas saber mucho más, si realmente tienes la oportunidad de jugar con más gente de vez en cuando Bomberman es un título ideal, casi imprescindible. Por número de opciones y capacidad de diversión estamos ante el mejor multijugador de Nintendo DS hasta la fecha, y muy posiblemente lo será durante mucho tiempo, hasta que lleguen los primeros lanzamientos online. Además, como ya se ha indicado, todas estas opciones se pueden jugar en solitario peleando contra la CPU, no es tan entretenido pero también va muy bien para cubrir momentos de aburrimiento o tiempo libre.