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Demencia digital
Los creadores de Layers of Fears hackean nuestros miedos en su última propuesta.
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Analizado en Xbox One. Copia digital proporcionada por Evolve PR .
En Polonia hay muchas cosas buenas. Una de ellas son programadores de videojuegos. Si CD Projekt RED se ha llevado todo el reconocimiento de la industria y el beneplácito del respetable por las tres entregas de The Witcher, Bloober Team aspira a seguir sus pasos. Este estudio resulta mucho más modesto, pero cada paso que dan se puede considerar de gigante. Tras una batería de juegos insulsos, sorprendieron con Layers of Fear un walking simulator de lo más interesante que fusionaba el terror más clásico con la pintura y el arte. Primer gran paso. Tras adaptar su obra a las plataformas de sobremesa más representativas y coronarlo con un contenido descargable de enjundia, se pusieron con su siguiente proyecto. Y ya lo tenemos, >Observer_ es su nueva propuesta y tenemos que adelantaros que vemos otro gran paso hacia adelante con respecto a Layers of Fear.
Vamos a hablar de >Observer_, un título de horror ambientado en un futuro cyberpunk que recuerda poderosamente a lo visto en películas como Blade Runner, Matrix o Dark City. Estamos en Polonia, en el año 2084. Ha pasado la gran guerra. Se ha sufrido una pandemia. Estas catástrofes han provocado que la sociedad quiera evadirse de su deprimente realidad y ahora viven enclaustrados en sus casas conectados a otra realidad virtual en la que sus mentes pueden evadirse gracias a unos implantes. La nanofagia, la plaga digital que ha diezmado a la población, ha sembrado el temor en los corazones de todos el mundo, hasta el punto que los "confinamientos" (encierros de los ciudadanos en sus domicilios mientras se investiga un posible brote) están admitidos por todos. En la KPD, la policía, están los "observer". Una fuerza del orden capaz de conectarse a los implantes de otras personas para visionar su subconsciente y descubrir tanto los secretos más ocultos como los miedos que atenazan su alma. Las posibilidades son infinitas, desde poder olvidar traumas hasta conseguir la paz que anhelamos. Pero... ¿qué pasa si alguien hackeara tus miedos?
Encarnamos a Daniel Lazarski, un "observer" que ya peina canas. En medio de un descanso recibe la llamada de su hijo Adam, la conversación es tensa hasta el punto que Daniel decide escanearla y buscar a su primogénito. Al llegar a la zona de viviendas, un lugar sórdido casi en ruinas, se produce una alarma que desata un "confinamiento". Nadie puede salir del edificio, por lo que Daniel decide buscar a Adam mientras descubre las miserias y dramas de los habitantes del lugar. Como si fuéramos un vendedor de enciclopedias Planeta, pasaremos buena parte de la aventura en los pasillos de la comunidad de vecinos mientras llamamos a los telefonillos para hablar con los ciudadanos que siguen atrapados en sus domicilios. Aquí nos damos cuenta que estamos en la dimensión demoniaca de Silent Hill pero en un episodio de La que se avecina. Estos polacos son la leche.