El segundo paso del gran viaje

Todo Gran Viaje comienza con un primer paso.
Éste es nuestro comienzo.
Gracias por confiarnos el universo que amas y acompañarnos en esta aventura épica.

Con esa frase firmaba 343 Industries el final de Halo 4, el primer juego desarrollado por ellos desde que heredaran los bártulos de Bungie. Un gran juego para poner el broche de oro en Xbox 360 y que significaba la firme promesa de que en este 2014 veríamos una nueva entrega de la serie en la nueva consola de Microsoft. Pero no ha sido así después de todo. Entre medias hemos tenido la oportunidad de jugar a un apéndice, una nueva aproximación que cambiaba su planteamiento pero que mantenía las trazas por las que la serie es conocida mundialmente. Un estratagema para promocionar Windows 8 y Windows Phone con un título muy diferente. Todo el mundo sospechaba que terminaría llegando a Xbox Live Arcade de Xbox 360, pero nos hemos encontrado con la sorpresa de que lo ha hecho antes en Xbox One. Hablamos de Halo Spartan Assault, título desarrollado principalmente por Vanguard Entertainment con la constante supervisión de 343 Industries. Este equipo de programación se encargó de Gatling Gears para las plataformas digitales, un juego que guarda muchos puntos en común con el que nos ocupa como veremos a continuación.

La historia se ubica entre los años 2553 y 2557, o lo que es lo mismo, entre los acontecimientos que transcurren entre Halo 3 y Halo 4. A lo largo de cinco campañas con seis niveles cada uno conoceremos las andanzas de la comandante Sarah Palmer y el Spartan Davis en el planeta Draetheus V, del ataque del Covenant sobre ellos, de la búsqueda de una poderosa arma Forerunner por parte de los religiosos enemigos de los humanos y del desenlace de toda esta odisea. Se ha incluído un nueva campaña que aporta dos novedades claves: los Flood y el juego cooperativo. De los primeros poco podemos decir a los seguidores de la serie, su vírica presencia nos pondrá en más de un aprieto durante las escaramuzas en las que nos enfrentaremos. De la modalidad cooperativa, destacar que es mediante Xbox Live y que se limita a dos jugadores, una pena que el resto de campañas no puedan jugarse bajo esta modalidad, aporta mucho dinamismo y diversión al conjunto.

De la primera persona pasamos a una perspectiva aérea, muy similar a la que hemos visto en juegos como Assault Heroes o Smash TV por citar algunos ejemplos. Aquellos que por las imágenes hayan pensado en Halo Wars que se vayan olvidando: el juego es todo acción y la única estrategia que tendremos será en el menú a la hora de elegir el armamento. Esto quiere decir que nos moveremos por amplios escenarios mientras disparamos a todos los enemigos que nos salen al paso. La buena noticia es que el control es como debe ser, con un stick para desplazarnos y el otro para apuntar, y no como ocurría en la versión de W8 y WP que el control táctil condicionaba de forma negativa la experiencia de juego. Como es lógico, el mando de Xbox One resulta mucho más fiable que una pantalla táctil para este tipo de juegos, por lo que solamente por poder utilizar los gatillos y las palancas ya supone una ventaja abismal respecto a la anterior versión.