La evolución no ha llegado

Los juegos de baile están de moda en Kinect. Primero ha sido Dance Central de Harmonix, ahora es Dance Evolution de Konami y en próximas fechas se pondrán a la venta Dance Paradise de Mindscape y Michael Jackson: The Experience de Ubisoft, todo un amplio repertorio donde elegir el que más se adecúe a las expectativas de cada uno.

Ojos para que os quiero

Si algo hay que destacar del juego no va a ser su apartado gráfico. Los escenarios y modelados de personajes son aceptables, pero la introducción de la imagen del jugador no ha sido muy acertada. La idea es la de no controlar a un personaje ficticio, Kinect captura la imagen del jugador y la introduce en el escenario, tal cual esté vestido y todo, como si de un personaje más se tratara. Es como si uno mismo se estuviera viendo por televisión. Los gráficos no son fotorrealistas, por lo que parece un poco ortopédico ver la imagen real mezclada con lo ficticio. Además, si no se guardan bien las distancias con Kinect se corre el riesgo de aparecer en la imagen sin parte de las piernas, cabeza y brazos.

Lo que sí son espectaculares son las coreografías y movimientos de los bailarines. Es posible que más de uno se quede prendado viendo cómo música y movimientos se solapan, contemplando un buen espectáculo. Se nota que se ha trabajado bien esta faceta, aunque la variedad y cantidad de canciones brille por su ausencia.

El apartado sonoro es muy importante y ha sido cuidado con grandes temas de los cuales la gran mayoría son dance y techno, lo que hace que no sean canciones que todo el mundo pueda conocer. Nadie se va a encontrar bailando canciones de Shakira, Rhianna, Madonna y compañía, que eso quede claro, ya que el tipo de música que se baila puede condicionar el que guste el juego o no.

Poco movimiento para tanta coreografía

Se puede decir que el control y desarrollo de los menús de los juegos de Kinect también son parte de la "jugabilidad" y si se tiene en cuenta esto, puede que más de uno se desespere navegando por ellos. Para activar la selección del menú hay que levantar la mano derecha hasta que quede a la altura del pecho y una vez que se consiga activar el botón de selección, mover izquierda o derecha para desplazarse por el menú. Cuando se quiera activar una opción, levantar la mano y esperar que se complete el círculo de OK de la parte superior derecha de la pantalla. Hasta ahí parece del todo normal, pero la tortura comienza cuando se quiere seleccionar una opción del menú levantando la mano, y este se desplaza a su antojo según le convenga a izquierda o derecha, seleccionando cualquier otra a la que no se quiere acceder y eso sin tener en cuenta las desactivaciones sin sentido y continuadas del botón "Seleccionar" del menú. Todo un despropósito y un reto, no ya jugar, sino conseguirlo.