Fitness VJ

Aprovechando que seguro muchos vais al gimnasio podríamos comentar al respecto, anécdotas inclusive.

El año pasado anduve varios meses en recepción y me encantó la experiencia porque la gente era tan ecléctica como simpática, creándose una sensación de grupo preciosa también con los monitores y otros trabajadores.

En mi caso jamás he hecho pesas (ni ganas), pues soy más de actividades como natación o spinning y para correr prefiero el aire libre aunque llueva.

Como suelo escuchar, quizá lo más difícil sea coger el hábito de ir y evitar la "pereza" sobre todo en invierno o días lluviosos.

He intentado ir de seguido varias veces pero no ha habido forma.

La primera en 2009 que estaba faneguillas y quería adelgazar. Un absoluto desastre, el entrenador me puso una tabla irrealizable, no me explicaba nada y usaba las máquinas del revés y a los dos meses lo acabé dejando sin bajar ni un gramo.

La segunda en Madrid en 2010, mismo motivo. Me apunté con mi amigo y compañero de piso a hacer spinning. Muy divertido. Un día nos dio por ir a la piscina y del calor que hacía y mi absoluta imposibilidad para nadar cinco metros sin ahogarme porque la respiración la hago mal me dio un ataque de ansiedad que tuvo que venir el Samur porque me había quedado como una estatua.

La tercera en Madrid, ya delgado (de ir en bici y correr) con mi mujer. Dos meses en los que mi mayor logro fue pisar una cinta en marcha y hacer un mortal en el aire y quedarme atascado entre la máquina y una pared hasta que mi mujer me levantó. No volví.

La cuarta y última vez en Valladolid. Hice spinning y lo mismo con elíptica, muy divertido. Mi mayor hito esta vez fue escapárseme un pedo haciendo abdominales.

Y eso es todo. Parece mucho pero en total unos 6 o 7 meses. Ya he aceptado que no va conmigo y no pienso volver jamás.

Cualquiera de las historias de Mysery es merecedora de un "se ha matado Paco" de manual .

En mi caso, hace unos cuantos años iba bastante al gimnasio, aunque por rachas, ya que siempre me había parecido una actividad aburrida, con demasiados puntos muertos en los que no haces nada, y encima es francamente cara. Por suerte, ahora que estoy haciendo cosas en casa, con un set muy básico de pesas y un banco de musculación, la experiencia me está resultado mucho más satisfactoria y beneficiosa en general. Ya no es simplemente una cuestión estética, que también (no vamos a negar la variable dosis de vanidad que tenemos todos tampoco), es que el chute de endorfinas y de dopamina que me llevo después de una sesión es impagable. Como fumarte 2 porros, básicamente.

También hago ejercicios de calistenia, con los que tengo más experiencia, pero en general tampoco me lo tomo demasiado en serio. No estoy mamadísimo ni quiero estarlo, el objetivo siempre ha sido tener un cuerpo atlético y sano, y un poco en esas estamos. El único problema es que a veces es un puto coñazo cuadrar el ejercicio dentro de la rutina diaria, sobre en todo en los días de trabajo... Tampoco creo que tenga solución, al final esto es cuestión de esforzarse un poquito todos los días que toca.

Tldr, los gimnasios son El Mal, J insultaba a la gente, Mysery casi se mata y yo tengo 3 posters de Schwarzenegger en el sótano en el que vivo.

A mí me gustan los gimnasios, es un ecosistema propio ajeno al mundo exterior, por supuesto con sus biomas: la zona de musculación, la de spinning, la zona de las clases, etc. Como no puede ser de otra manera, cada bioma tiene su fauna que es que es tan estereotípica que ya no hace falta ni que la comente, todos sabemos de qué y quiénes hablamos.

Yo he ido dos veces al gimnasio, siempre acompañado con algún amigo porque de verdad que ir solo es infumable, aunque a la que seas mínimamente abierto ahí puedes conocer gente y acabar haciendo ejercicios juntos o simplemente charlar para que se te haga un poco amena la sesión.

Las dos veces que fui era para lo mismo: ganar músculo, un poco de hipertrofia y todo eso, que siempre he sido un palo. Un palo atlético porque he hecho deporte siempre, pero un palo a fin de cuentas. Lo cierto es que mis kilitos de músculo los conseguí y los resultados eran buenos y bonitos pero mi problema siempre es el mismo: mi fuerza de voluntad es frágil y siempre que llegaba el verano perdía mis rutinas de clase/trabajo y con ello también las del gimnasio. Y, claro, todo lo que conseguía en 6-8 meses se iba por el desagüe en menos de 2 meses.

Justamente, han abierto un gimnasio chiquitito de esos low cost en mi barrio y me he apuntado, el lunes empiezo a ver qué tal. Me gustaría ir haciendo cositas y a ver si mi cuerpo tiene memoria muscular o algo y recupero aquello que gané y tiré por la borda.

Citando a Mysery:
...He intentado ir de seguido varias veces pero no ha habido forma.

La primera en 2009 que estaba faneguillas y quería adelgazar. Un absoluto desastre, el entrenador me puso una tabla irrealizable, no me explicaba nada y usaba las máquinas del revés y a los dos meses lo acabé dejando sin bajar ni un gramo.

La segunda en Madrid en 2010, mismo motivo. Me apunté con mi amigo y compañero de piso a hacer spinning. Muy divertido. Un día nos dio por ir a la piscina y del calor que hacía y mi absoluta imposibilidad para nadar cinco metros sin ahogarme porque la respiración la hago mal me dio un ataque de ansiedad que tuvo que venir el Samur porque me había quedado como una estatua.

La tercera en Madrid, ya delgado (de ir en bici y correr) con mi mujer. Dos meses en los que mi mayor logro fue pisar una cinta en marcha y hacer un mortal en el aire y quedarme atascado entre la máquina y una pared hasta que mi mujer me levantó. No volví.

La cuarta y última vez en Valladolid. Hice spinning y lo mismo con elíptica, muy divertido. Mi mayor hito esta vez fue escapárseme un pedo haciendo abdominales.

Y eso es todo. Parece mucho pero en total unos 6 o 7 meses. Ya he aceptado que no va conmigo y no pienso volver jamás.

Literalmente yo. 😂

Tuve época de salir a correr, otra de gimnasio por mi cuenta, otra de gimnasio con una amiga que tiene formación de nutrición y es entrenadora...

No va conmigo. Me aburre, me da palo, siempre me cuesta y nunca he terminado de llegar al punto ese al que llegan muchos de que se "enganchan" al ejercicio.
Quizá llegué un poco cuando salía a correr solo, ahí no me costaba tanto cuando ya corría 10km, 4 veces por semana... pero en cuanto lo dejaba por ir de vacaciones o gripe o cosas así, me costaba horrores retomar el ritmo.

Al final he encontrado el equilibrio en mejorar mi alimentación y caminar bastante cada día paseando al perro. He adelgazado bastante y me siento bien así. Y lo más importante, no me cuesta ni me da palo.

Citando a RobeR:

Citando a Mysery:
...He intentado ir de seguido varias veces pero no ha habido forma.

La primera en 2009 que estaba faneguillas y quería adelgazar. Un absoluto desastre, el entrenador me puso una tabla irrealizable, no me explicaba nada y usaba las máquinas del revés y a los dos meses lo acabé dejando sin bajar ni un gramo.

La segunda en Madrid en 2010, mismo motivo. Me apunté con mi amigo y compañero de piso a hacer spinning. Muy divertido. Un día nos dio por ir a la piscina y del calor que hacía y mi absoluta imposibilidad para nadar cinco metros sin ahogarme porque la respiración la hago mal me dio un ataque de ansiedad que tuvo que venir el Samur porque me había quedado como una estatua.

La tercera en Madrid, ya delgado (de ir en bici y correr) con mi mujer. Dos meses en los que mi mayor logro fue pisar una cinta en marcha y hacer un mortal en el aire y quedarme atascado entre la máquina y una pared hasta que mi mujer me levantó. No volví.

La cuarta y última vez en Valladolid. Hice spinning y lo mismo con elíptica, muy divertido. Mi mayor hito esta vez fue escapárseme un pedo haciendo abdominales.

Y eso es todo. Parece mucho pero en total unos 6 o 7 meses. Ya he aceptado que no va conmigo y no pienso volver jamás.

Literalmente yo. 😂

Tuve época de salir a correr, otra de gimnasio por mi cuenta, otra de gimnasio con una amiga que tiene formación de nutrición y es entrenadora...

No va conmigo. Me aburre, me da palo, siempre me cuesta y nunca he terminado de llegar al punto ese al que llegan muchos de que se "enganchan" al ejercicio.
Quizá llegué un poco cuando salía a correr solo, ahí no me costaba tanto cuando ya corría 10km, 4 veces por semana... pero en cuanto lo dejaba por ir de vacaciones o gripe o cosas así, me costaba horrores retomar el ritmo.

Al final he encontrado el equilibrio en mejorar mi alimentación y caminar bastante cada día paseando al perro. He adelgazado bastante y me siento bien así. Y lo más importante, no me cuesta ni me da palo.

Calcado. Correr me encantaba y hacía 30km semanales, pero llegaba verano y lo dejaba. Y ahora como tú, alimentación y pasear al perro. Almas gemelas

Nunca he ido al gimnasio, ni creo que lo haga. Cuando era joven en la época estival me gustaba nadar, mucho.
En el Confinamiento, llegué a perder cuatro kilos corriendo tres veces por semana delante de la Wii (wiifit plus). Y eso

Saludos.

Otro traumatizado con los gimnasios. He ido varias veces a lo largo de mi vida y siempre lo he acabado dejando.

El primero fue en la época del instituto, fui bastante tiempo.

El segundo fue un Holiday Gym al que me apunté con un compañero de la universidad. Al final no iba nunca, claro (él, yo sí que iba).

El tercero fue cuando trabajaba en el centro. Era un gimnasio que entrenaba a chavales para veladas de boxeo, así que os podéis imaginar la fauna que había. Estuve yendo bastante tiempo en plan cuatro días por semana, pero me cansé de ser el único que no tenía unos abdominales en los que rallar queso. No soy de ponerme muy cachas, qué le vamos a hacer.

El cuarto fue una experiencia verdaderamente espantosa. Se me cruzaron los cables y me apunté a unas clases de ejercicio extremo delante de mi casa con una monitora que ríase usted de la teniente O'Neil. La gente acababa machacada; de hecho, al final de la primera clase me dijo "He visto que te ponías un poco amarillo y todo, ja, ja". Los compañeros me veían sufrir y me decían "Tranqui, esto nos pasa a todos, después de cuatro o cinco clases te acostumbras". No volví porque no me apetecía tener flashbacks del Vietnam de cuando tenía clase de gimnasia en el instituto. No me gustan las cosas en las que hay que sobar a desconocidos: aquí había ejercicios de llevar a la peña en brazos y cosas así.

El quinto fue el mejor de todos. Antes de la pandemia, estuve seis meses yendo al Brooklyn, una cadena de gimnasios de kickboxing (hay un montón en Madrid y supongo que en más sitios). Me gustaba* porque era de hacer coreografías con un saco y no había que interactuar con nadie, pero tengo unas muñecas ridículas y lo dejé cuando me empezaron a doler. Entre el kickboxing y poder teclear y tocar la batería, tengo claro lo que prefiero.

Justo el otro día estuve haciendo ejercicios de muay thai con un amigo que está formándose para ser entrenador y me lo pasé bien, la verdad. Me entraron ganas de desempolvar los guantes.

Por lo demás, jugué al tenis cuando era pequeño y cuando estudiaba informática en la Complutense. Nunca he sido muy bueno, pero tenía un revés más que decente (empecé con una mano copiando a Federer y me lo cambiaron a dos, claro).

Ahora mismo me vendría bien hacer ejercicio porque en cuanto me descuido un poco me pongo como un fudre.* Pero pienso en mi historial y se me quitan un poco las ganas. Había pensado en ir a la piscina o algo.

*Todo lo que me puede gustar hacer ejercicio, entiéndase.
**Así es como llamamos en mi casa a la gente con una pasión desmedida por la comida.

Voy a correr habitualmente (de dos a cuatro veces por semana) e intento hacer unas cuantas flexiones, abdominales y otra cosa que no se como se llama.

En general me mantengo bastante bien. Barriga cervecera, pero por lo demás bien. Ya ni me molesto en hacer que desaparezca.

He pensado en apuntarme a algún gimnasio, pero nunca he dado el paso.

Citando a Hagaren:
No volví porque no me apetecía tener flashbacks del Vietnam de cuando tenía clase de gimnasia en el instituto

Pero a ver, te ponías amarillo así que eras un charlie, así que los flashbacks serían otros, ¿no?

Citando a Mysery:

Citando a Hagaren:
No volví porque no me apetecía tener flashbacks del Vietnam de cuando tenía clase de gimnasia en el instituto

Pero a ver, te ponías amarillo así que eras un charlie, así que los flashbacks serían otros, ¿no?

Yo solo te digo que Rambo trataba mejor a los charlies que esa mujer a mí.

Menudas historias.

En mi caso aprovecho que tengo entrada y tiempo libre para ir casi a diario sobre todo a pádel, natación o spinning pues ya comenté que "huyo" de las pesas y máquinas. Curiosamente disfruto mucho yendo solo (andando, en bus o bicicleta), aunque allí tengo conocidos a espuertas de eclécticas edades.

Citando a mofling:
Voy a correr habitualmente e intento hacer unas cuantas flexiones, abdominales y otra cosa que no se como se llama [pero tengo] Barriga cervecera

Citando a Hagaren:
cuando era pequeño (...) tenía un revés más que decente (empecé con una mano copiando a Federer y me lo cambiaron a dos, claro).

Lástima, pues nada hay más bonito que el revés a una mano.

Citando a J.V.R 1977:

Lástima, pues nada hay más bonito que el revés a una mano.

Pues sí. Pero si el 95 % de los tenistas lo hacen a dos manos, por algo será.

No soy de gimnasio ni de hacer ejercicio en un lugar cerrado, porque muchas veces me produce un ligero dolor de cabeza. Además, me aburro y huele mal Lo tengo claro desde que iba al colegio y tocaba educación física en el gimnasio. Y no solo ejercicio, sino que tampoco me gustaba jugar al fútbol-sala en un pabellón; al contrario que el resto de chavales, a mí me gustaba jugar al aire libre, no en un sitio cerrado donde las voces retumbaban entre las paredes, el parqué solía crujir, la luz era tenue y la respiración era más complicada que en el exterior.

También he probado los gimnasios como tal, con sus máquinas que parecen aparatos torturadores de la Inquisición. La primera vez fue en unas vacaciones en Florida, allá por 1996, y después en 2006 ó 2007, cuando me saqué el abono anual del Ayuntamiento (debió ser para aprovechar el último año en que podía acceder al "abono joven" ). Ni el gimnasio ni la piscina cubierta me cautivaron...

Lo mío es hacer deporte en el exterior. Ya lo he comentado varias veces: bici (si dispongo de unas 3 horas libres), tenis, los partidillos en la urbanización con mis hijos y vecinos, y, muy de vez en cuando, salgo a correr (si en la semana no he podido hacer otra cosa y solo dispongo de 30 minutos libres). Aparte, también soy entrenador de fútbol y hago alguna ruta (este domingo raquetas por la nieve), que aunque no sea deporte como tal, sí que es "vida activa".

Citando a mofling:
Voy a correr habitualmente (de dos a cuatro veces por semana) e intento hacer unas cuantas flexiones, abdominales y otra cosa que no se como se llama.


...follar

Citando a Hagaren:
Pues sí. Pero si el 95 % de los tenistas lo hacen a dos manos, por algo será.

Por fortuna tenemos a Wawrinka o Tsitsipas, a ver si se vuelve a poner de "moda".

Citando a GRECIA:
Aparte, también soy entrenador de fútbol (...)

¿Qué tal la experiencia en general? Imagino que debe ser complicado hacer que todos estén contentos.

Citando a J.V.R 1977:

Citando a GRECIA:
Aparte, también soy entrenador de fútbol (...)

¿Qué tal la experiencia en general? Imagino que debe ser complicado hacer que todos estén contentos.

Creo que están todos más o menos contentos, contando con que hay muchos a los que realmente no les gusta el fútbol y van por estar con los amigos. Teniendo en cuenta que somos ya 17 en el equipo y me van entre 15 y 17 a los entrenamientos, pese al frío que está haciendo este mes y la lluvia e incluso nieve que nos ha caído en algunos momentos, estoy muy satisfecho en ese sentido. Ayuda también que hago los entrenamientos pensando más en la diversión que el aprendizaje, porque teóricamente es un equipo poco competitivo (en el club hay dos equipos más fuertes de chavales de su edad) y que ya digo que se lo toman más como un recreo que como un reto.

Para mí la experiencia es impagable. Mientras entrenas o juegas partidos, desconectas de todo lo demás y, a pesar de lo pesados que pueden ser algunos durante los entrenamientos, al final te sientes comprometido y lo vives con cada uno de ellos.

cuando era pequeño jugaba a futbito (porque el futbol sala si eres pequeño es futbito) y en la primera sesión de entrenamiento que tuvimos ever nuestro entrenador imitó a coco. total, que le quedó Coco como mote y el pobre al principio lo ODIABA pero luego lo abrazó, y a día de hoy considero ese momento ene l que pasó de "oye que me llamo carlos" a "HOLA, SOY COCO, ESTO ES IR POR LA BANDA Y ESTO ES PASAR ANTES DE TIEMPO" como una genialidad.

ah y estoy gordaco porque eh pa que hacer gimnasia si nos vamos a morir todos etc.

Citando a GRECIA:
Creo que están todos más o menos contentos, contando con que hay muchos a los que realmente no les gusta el fútbol y van por estar con los amigos. Teniendo en cuenta que somos ya 17 en el equipo y me van entre 15 y 17 a los entrenamientos, pese al frío que está haciendo este mes y la lluvia e incluso nieve que nos ha caído en algunos momentos, estoy muy satisfecho en ese sentido. Ayuda también que hago los entrenamientos pensando más en la diversión que el aprendizaje, porque teóricamente es un equipo poco competitivo (en el club hay dos equipos más fuertes de chavales de su edad) y que ya digo que se lo toman más como un recreo que como un reto.

Para mí la experiencia es impagable. Mientras entrenas o juegas partidos, desconectas de todo lo demás y, a pesar de lo pesados que pueden ser algunos durante los entrenamientos, al final te sientes comprometido y lo vives con cada uno de ellos.

Genial, lo importante es empatizar con todos y disfrutar cada momento... ¿Te planteas llevar algún equipo de más edad?

Citando a J.V.R 1977:

Citando a GRECIA:
Creo que están todos más o menos contentos, contando con que hay muchos a los que realmente no les gusta el fútbol y van por estar con los amigos. Teniendo en cuenta que somos ya 17 en el equipo y me van entre 15 y 17 a los entrenamientos, pese al frío que está haciendo este mes y la lluvia e incluso nieve que nos ha caído en algunos momentos, estoy muy satisfecho en ese sentido. Ayuda también que hago los entrenamientos pensando más en la diversión que el aprendizaje, porque teóricamente es un equipo poco competitivo (en el club hay dos equipos más fuertes de chavales de su edad) y que ya digo que se lo toman más como un recreo que como un reto.

Para mí la experiencia es impagable. Mientras entrenas o juegas partidos, desconectas de todo lo demás y, a pesar de lo pesados que pueden ser algunos durante los entrenamientos, al final te sientes comprometido y lo vives con cada uno de ellos.

Genial, lo importante es empatizar con todos y disfrutar cada momento... ¿Te planteas llevar algún equipo de más edad?

Estoy también de segundo en unos infantiles de fútbol. Me gustan más los benjamines y el fútbol 7. Si sigo el año que viene, pediré un solo equipo que sea prebenjamín, benjamín o, como mucho, alevín.