Impresiones Jugables: el soldado definitivo

Über, para los no duchos en la lengua alemana, viene a decir algo así como pasarse de un límite marcado. Con esta simple aclaración uno se da cuenta fácilmente de que en este juegos estaremos manejando un llamado "supersoldado", capaz de las más enrevesadas maniobras de guerra.

El origen del superhombre

En agosto de 1942 los experimentos nazis se centran en la resurrección de los muertos. Tras varios experimentos se dan cuenta de que los revividos vuelven al mundo de los vivos con poderes sobrenaturales, que tras ser perfeccionados dan lugar a la nueva raza de guerreros que sembrarán el caos, los Übersoldier.

En este momento entra en acción nuestro hombre, Karl Stolz, un oficial asesinado mientras dirigía operaciones contra los revolucionarios. Eres uno de los elegidos para ser revivido y engrosar las filas de los terroríficos soldados. Pero tras volver a la vida te das cuenta que el mal hecho por tus superiores nazis, en tus entrenamientos y tu vida militar, engendra un odio que necesita una venganza inminente.

Y ahí entramos nosotros, manejando a un soldado capaz de diferentes habilidades y que las usará para vengarse de todo lo nazi que pase por delante. Los más avispados y veteranos jugadores pensarán que nos encontramos con algo así como lo que vivimos hace ya muchos años en Wolfestein. Y no se equivocan, pues el desarrollo de la acción será muy parecido al que ya observamos en Wolfestein: nosotros contra el mundo.

Habilidades de un supersoldado

En este título no encontraremos excesivas novedades a lo que ya hemos visto y revisto en el saturado género del shooter pero las que tenemos son más que interesantes.

Son básicamente dos. La primera es la inclusión de un escudo que nos envolverá y nos protegerá de las balas y hará daño a nuestros enemigos al contactar con ellos (pero los dejará atravesarlo). Dicho escudo tendrá una duración limitada por una barra que se irá recargando. Para recargar dicho escudo deberemos eliminar a tres enemigos seguidos con un disparo en la cabeza, en un límite de tiempo que comenzará a partir del primer cadáver. Un sistema muy entretenido y que nos convertirá en ases de la puntería. Al llegar a la cantidad máxima de la barra, las balas que intercepte nuestro escudo rebotarán hacía el que las ha disparado, convirtiéndonos en una máquina de matar indestructible. Todo esto, claro está, por un espacio de tiempo limitado, hasta que la barra se descargue.

Del mismo modo al hecho de tener que acertar en la cabeza, si eliminamos a tres enemigos seguidos con el cuchillo en un intervalo de tiempo que comienza cuando eliminamos al primero, conseguimos un aumento de la salud permanentemente; así podemos llegar a tener cantidades de salud nunca vistas antes.