Atracciones fatales

Microsoft tiene preparado tres títulos exclusivos para los primeros meses de este 2015 que acaba de arrancar, todo ellos anunciados el años pasado, pero de los que desconocíamos tanto su fecha de comercialización como los detalles de puesta de largo. Uno de los más llamativos es sin duda ScreamRide, desarrollado por Frontier Developments. Este estudio británico se ha caracterizado por programar videojuegos para toda la familia, desde experiencias que aprovechaban Kinect de forma brillante (como Kinectmals o Kinect Disneyland Adventures) a otros en los que los parques de atracciones eran la base de la experiencia (como Thrillville o el reciente Zoo Tycoon). Ahora vuelven a aliarse con Microsoft Games Studios y a principios del mes de marzo tendremos su nueva propuesta en Xbox One y Xbox 360. Agarrarse que vienen curvas.

En un futuro no muy lejano, aunque algo soporífero, la población tiende a aburrirse y demanda de forma constante nuevas experiencias. Es tal la necesidad de vivir al límite que son capaces de exponer sus propias vidas a riesgos innecesarios con tal de salir de la apatía que los domina. Ahí es donde entrar el jugador en escena, ya que seremos los principales responsables de las gigantescas montañas rusas que se han convertido en el principal entretenimiento de la gente. Tendremos que poner toda nuestra sapiencia y habilidad en los diferentes modos de juego para lograr completar las misiones que se abren ante nosotros.

El juego dispone principalmente de tres modos de juego muy diferentes. El primero de ellos es el que menos esperábamos encontrar, el de conductor de los vagones. Nosotros tendremos el dominio del tren que recorre los raíles, de manera que podremos acelerar o frenar para evitar que los integrantes salgan despedidos de sus compartimentos. No será lo único que podremos hacer, además podremos ponerlos sobre un costado de las ruedas para aprovechar el peso, de forma que el contador de combos se dispare a nuestro favor (también servirá para esquivar los obstáculos estratégicamente colocados para hacernos descarrillar), aunque evidentemente potenciará el riesgo de volcar hacia un lado. El manejo será muy arcade y sencillo, de cara a que cualquier tipo de jugador pueda ponerse al mando y establecer una marca en la tabla de registros. Alcanzar las puntuaciones más altas en cada recorrido para posteriormente compararlas con las de otros jugadores será una de sus bazas más interesantes.

Otra parte del juego se llamará "Ingeniero" y en ella deberemos solventar puzles con un número limitado de piezas. No solamente tendremos que hacer que el recorrido pueda terminarse sin ningún incidente, además tendremos que maximizar la puntuación de la pista al aprovechar todas las bonificaciones de puntuación que estén diseminadas por el camino. Por último tendremos la parte de "Demolición" en la que tendremos que conseguir la mayor cadena de daños posibles durante el recorrido de nuestra vagoneta. Las reacciones en cadena y los multiplicadores de combos entran de nuevo en escena mientras comprobamos cómo los edificios caen a nuestro paso como si fichas de dominó se tratasen. Sobra decir que será la parte más espectacular del juego.

Una de las particularidades de ScreamRide es que podremos encontrar los tres modos de juego mezclados en ciertas pruebas, de manera que tendremos que completar un recorrido con un número de piezas, y de paso, conseguir una cantidad de daños lo suficientemente alta para continuar. La construcción y la destrucción se dan la mano al unísono. Lo que no faltará será un completo editor al que ya algunos comparan en profundidad y simpleza con el visto en Minecraft. Dispondremos de un sinfín de piezas para utilizar a la hora de montar las montañas rusas, pero también tendremos una ingente cantidad de adornos para que nuestras construcciones se distingan lo suficiente de las creadas por otros jugadores. Como era de esperar, podremos compartir nuestra construcciones con la comunidad, lo que le confiere al título una vida útil mucho más larga de lo esperado inicialmente.

ScreamRide llega además a precio reducido, sobre los cuarenta euros en su versión para Xbox One y diez euros menos en Xbox 360. Quizás no se trate del título exclusivo más llamativo de todo el catálogo, pero el buen hacer demostrado por Frontier Developments hasta el momento y la espectacularidad de su propuesta (vertiginosas montañas rusas que provocan explosiones y destrucción de edificios a su paso) promete cuanto menos que le sigamos la pista. Veremos si la versión final resulta tan divertida como suena, porque el planteamiento promete muchas horas diseñando y reventando millones de piezas.