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Toda la información sobre Hogwarts y las casas en Hogwarts Legacy
¿A qué casa te unirás en Hogwarts Legacy? Hablamos sobre las salas comunes, las virtudes, y los personajes más famosos de cada una, para que el próximo RPG de Harry Potter no te pille desprevenido
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Una de las verdades universales sobre Harry Potter es que su hechizo no reside en las desventuras mágicas de su protagonista homónimo, que va muy justito en temas de personalidad y de decisiones vitales, sino en el mundo de increíbles, de fantasía evocadora, que J. K. Rowling se sacó de la chistera para la ocasión, incluso con los vaivenes de la escritora londinense en todo lo referido a la libertad de las especies sintientes, y de la tolerancia en general. Leer Harry Potter es querer participar en una realidad paralela, una existencia mejor en la que la prisión de la realidad cotidiana, prosaica y aburrida como pocas, aceptémoslo (2020 reveló que seríamos aburridos incluso para extinguirnos), da paso a algo que está más allá, a una felicidad superpuesta que te está esperando, únicamente a una carta voladora de distancia.
Por supuesto, buena parte del encanto reside precisamente en la propia Hogwarts, un legendario paraje ficticio que está repleto de edificaciones y objetos reales, pero readaptados al mundo del cine: el castillo Alnwick de Inglaterra, el increíble tren Jacobite de Escocia, la Biblioteca Bodleiana de Oxford… La lista sigue un buen rato, así que vamos a dejarlo en que si te quieres pegar un tour de Harry Potter en la vida real tienes ahí un buen agujero negro de dinero. De todas maneras, para mí las casas de Hogwarts juegan un papel muy especial en el atractivo del mundo de Rowling, así que vamos a aprovechar que la salida de Hogwarts Legacy está más cerca que nunca (10 de febrero) para hacer un breve repaso por sus salas comunes, sus personajes más relevantes y, cómo no, el perfil de estudiantes que busca cada una de ellas.
Gryffindor
Vamos primero con Gryffindor no porque sea la más famosa, sino porque en esta casa respetamos las leyes alfabéticas (como Homer con la termodinámica, pero con menos poder dialéctico). La casa de Harry, Hermione, Ron, el resto de hermanos Weasley, y básicamente toda la peña decente en las cinco primeras pelis es parte de la dicotomía bien-mal, valentía-ambición que plantea Rowling, no sin ciertos claroscuros. Sea como fuere, la sala común de Gryffindor está en una de las dos torres principales del castillo, y está decorada con motivos dorados y rojizos, en representación de los dos colores de su emblema. Tanto en Hogwarts Legacy como en las adaptaciones cinematográficas aparece como una amplia sala de fastuosa decoración victoriana, repleta de cuadros vivientes, sillones para hablar con tus compañeros magos y demás movidas.

En cuanto a los personajes más famosos, hay demasiados, honestamente: además de su fundador, Godric Gryffindor, todos los Potter menos Albus, todos los Weasley, Hermione, Neville, Dumbledore, McGonagall, Lupin, Sirius Black, Lily Evans… A Rowling se le fue de las manos, sin duda; si eres buen tío y eres importante, estás en Gryffindor, sin más. En temas de personalidad, ya sabes que esto va un poco como con el horóscopo, porque luego el Sombrero Seleccionador te pone donde tú le pides o, en su defecto, donde a él le apetece, pero en teoría buscan gente atrevida, valiente, con poco aprecio por la vida propia, caballerosidad y una pizca de locura.
Hufflepuff
Hufflepuff era la casa meme de Harry Potter hasta que llegó Newt Scamander y dijo “chavales, relax, que aquí estoy yo”, algo que me parecería perfecto si no fuera porque ahora Ravenclaw, mi casa favorita de toda la vida, se ha quedado relegada al puesto de la vergüenza y del ostracismo en Hogwarts. Delirios al margen, la sala común de Hufflepuff está al lado de las cocinas del castillo (#NoSePodíaSaber), y es descrita como una amplia estancia coronada por una profusión de plantas, hierbas de todo tipo, en una especie de simbiosis con la naturaleza que siempre me ha parecido muy interesante. Así, tal cual, parece ser que la tendremos en Hogwarts Legacy, por cierto.

En cuanto a personajes distinguidos que pertenecen a Hufflepuff, encontramos a su fundadora, Helga Hufflepuff, así como a Newton Scamander, el protagonista de Animales Fantásticos, y a Cedric Diggory, un joven mago interpretado por el otrora infame Robert Pattinson (se redimió por completo con El Faro, de Eggers). También andan por ahí Nymphadora Tonks y unos cuantos más, pero aquí ya nos estamos metiendo en menciones un tanto menores. A nivel de personalidad, Hufflepuff es la casa de la tranquilidad más absoluta, del buen rollito en su máximo esplendor, del poder de la amistad; imagínate hasta dónde llega el tema que los requisitos para entrar aquí suelen ser la lealtad, la tolerancia y la modestia.
Ravenclaw
La casa más maltratada del trasfondo de Harry Potter, el patito feo, la desgracia de Hogwarts y de Rowling, otro agravio personal más… Perdón, es que me pongo sensible. Ravenclaw es uno de los síntomas más claros de las oportunidades perdidas en el Mundo Mágico; es la casa de la astronomía, de la erudición, de la extravagancia, de la adivinación, de la búsqueda del conocimiento, incluso a riesgo de perder la vida, lo que la hace una especie de nexo entre la valentía de Gryffindor y la ambición desmedida de Slytherin. No obstante, es innegable que Ravenclaw en los libros está poco más que de adorno, y las películas tampoco han terminado de sacar todo el potencial que esconde simplemente en sus ideas fundacionales. Lo que podría salir de ella a nivel narrativo, especialmente en términos de protagonistas y personajes trascendentes, es territorio inexplorado en su plenitud.

Por su parte, la sala común de Ravenclaw está situada en la otra torre principal de Hogwarts, y tiene una conexión especial con las estrellas debido a sus bóvedas celestes. También posee una biblioteca privada para los miembros de la casa, de la que se dice que no es tan grande como la principal de la escuela pero tiene casi el mismo número de libros… Vete a saber cómo se lo han montado para meter tanto leño mágico por ahí. Personajes famosos, eso sí, no vas a encontrar tantos: su fundadora, Rowena Ravenclaw, Garrick Ollivander, el mítico fabricante de varitas, Luna Lovegood, Trelawney, el cansino de Gilderoy Lockhart, Flitwick, Quirrell… y poco más. Ni protagonistas de spin-offs, ni antagonistas, ni nada, lo cual, en mi opinión, abre las puertas a la libertad plena en Hogwarts Legacy, porque no tienes que estar a la sombra de nada ni de nadie. En cuanto a las cualidades principales de sus miembros, destacan la inteligencia, la sabiduría, la creatividad, y el ingenio. Si te mola estudiar, estás dentro.
Slytherin
Cerramos con la infame Slytherin, cuyo trasfondo ha sido un pelín maltratado en las películas, en el sentido de que en realidad no era para tanto. Siempre relacionada con los malos malosos, con la gentuza del mundo mágico, Slytherin más bien es la casa de la ambición maquiavélica, del fin justifica los medios y todo eso, por mucho que el autor florentino nunca dijera esto tal cual. Su sala común está en las mazmorras, bastante cerca de donde suceden todos los líos de magia oscura, por alguna extraña razón, y transmite tonalidades verdosas y cadavéricas debido al efecto del río que fluye encima de ella. Probablemente es la menos acogedora de las estancias comunes, aunque no por ello la menos interesante. La representación de Hogwarts Legacy no solo parece ser bastante fiel a la pluma de Rowling, sino que además es más sobria, más elegante de lo que cabría esperar.

En fin, todo lo que no tiene Slytherin de hospitalaria lo tiene de famosa, en tanto en cuanto de aquí han salido mil nombres que te sonarán a poco que hayas visto solo una de las adaptaciones cinematográficas: su fundador, Salazar Slytherin, Voldemort, Severus Snape (el mejor personaje de Harry Potter), los Malfoy, Bellatrix Lestrange, la insoportable Dolores Umbridge, la familia Black, a excepción de Sirius, un montón de Mortífagos de primera generación y hasta Merlín, en teoría el mejor mago de la historia, ahí, ahí con Dumbledore. De nuevo, otra lista donde sobran nombres, pero qué se le va a hacer. Los valores principales de Slytherin son el orgullo, la astucia, la ambición, la determinación y el instinto de autopreservación, motivo por el cual son los principales sospechosos siempre que pasa algo.
Por supuesto, buena parte del encanto reside precisamente en la propia Hogwarts, un legendario paraje ficticio que está repleto de edificaciones y objetos reales, pero readaptados al mundo del cine: el castillo Alnwick de Inglaterra, el increíble tren Jacobite de Escocia, la Biblioteca Bodleiana de Oxford… La lista sigue un buen rato, así que vamos a dejarlo en que si te quieres pegar un tour de Harry Potter en la vida real tienes ahí un buen agujero negro de dinero. De todas maneras, para mí las casas de Hogwarts juegan un papel muy especial en el atractivo del mundo de Rowling, así que vamos a aprovechar que la salida de Hogwarts Legacy está más cerca que nunca (10 de febrero) para hacer un breve repaso por sus salas comunes, sus personajes más relevantes y, cómo no, el perfil de estudiantes que busca cada una de ellas.
Gryffindor
Vamos primero con Gryffindor no porque sea la más famosa, sino porque en esta casa respetamos las leyes alfabéticas (como Homer con la termodinámica, pero con menos poder dialéctico). La casa de Harry, Hermione, Ron, el resto de hermanos Weasley, y básicamente toda la peña decente en las cinco primeras pelis es parte de la dicotomía bien-mal, valentía-ambición que plantea Rowling, no sin ciertos claroscuros. Sea como fuere, la sala común de Gryffindor está en una de las dos torres principales del castillo, y está decorada con motivos dorados y rojizos, en representación de los dos colores de su emblema. Tanto en Hogwarts Legacy como en las adaptaciones cinematográficas aparece como una amplia sala de fastuosa decoración victoriana, repleta de cuadros vivientes, sillones para hablar con tus compañeros magos y demás movidas.

En cuanto a los personajes más famosos, hay demasiados, honestamente: además de su fundador, Godric Gryffindor, todos los Potter menos Albus, todos los Weasley, Hermione, Neville, Dumbledore, McGonagall, Lupin, Sirius Black, Lily Evans… A Rowling se le fue de las manos, sin duda; si eres buen tío y eres importante, estás en Gryffindor, sin más. En temas de personalidad, ya sabes que esto va un poco como con el horóscopo, porque luego el Sombrero Seleccionador te pone donde tú le pides o, en su defecto, donde a él le apetece, pero en teoría buscan gente atrevida, valiente, con poco aprecio por la vida propia, caballerosidad y una pizca de locura.
Hufflepuff
Hufflepuff era la casa meme de Harry Potter hasta que llegó Newt Scamander y dijo “chavales, relax, que aquí estoy yo”, algo que me parecería perfecto si no fuera porque ahora Ravenclaw, mi casa favorita de toda la vida, se ha quedado relegada al puesto de la vergüenza y del ostracismo en Hogwarts. Delirios al margen, la sala común de Hufflepuff está al lado de las cocinas del castillo (#NoSePodíaSaber), y es descrita como una amplia estancia coronada por una profusión de plantas, hierbas de todo tipo, en una especie de simbiosis con la naturaleza que siempre me ha parecido muy interesante. Así, tal cual, parece ser que la tendremos en Hogwarts Legacy, por cierto.

En cuanto a personajes distinguidos que pertenecen a Hufflepuff, encontramos a su fundadora, Helga Hufflepuff, así como a Newton Scamander, el protagonista de Animales Fantásticos, y a Cedric Diggory, un joven mago interpretado por el otrora infame Robert Pattinson (se redimió por completo con El Faro, de Eggers). También andan por ahí Nymphadora Tonks y unos cuantos más, pero aquí ya nos estamos metiendo en menciones un tanto menores. A nivel de personalidad, Hufflepuff es la casa de la tranquilidad más absoluta, del buen rollito en su máximo esplendor, del poder de la amistad; imagínate hasta dónde llega el tema que los requisitos para entrar aquí suelen ser la lealtad, la tolerancia y la modestia.
Ravenclaw
La casa más maltratada del trasfondo de Harry Potter, el patito feo, la desgracia de Hogwarts y de Rowling, otro agravio personal más… Perdón, es que me pongo sensible. Ravenclaw es uno de los síntomas más claros de las oportunidades perdidas en el Mundo Mágico; es la casa de la astronomía, de la erudición, de la extravagancia, de la adivinación, de la búsqueda del conocimiento, incluso a riesgo de perder la vida, lo que la hace una especie de nexo entre la valentía de Gryffindor y la ambición desmedida de Slytherin. No obstante, es innegable que Ravenclaw en los libros está poco más que de adorno, y las películas tampoco han terminado de sacar todo el potencial que esconde simplemente en sus ideas fundacionales. Lo que podría salir de ella a nivel narrativo, especialmente en términos de protagonistas y personajes trascendentes, es territorio inexplorado en su plenitud.

Por su parte, la sala común de Ravenclaw está situada en la otra torre principal de Hogwarts, y tiene una conexión especial con las estrellas debido a sus bóvedas celestes. También posee una biblioteca privada para los miembros de la casa, de la que se dice que no es tan grande como la principal de la escuela pero tiene casi el mismo número de libros… Vete a saber cómo se lo han montado para meter tanto leño mágico por ahí. Personajes famosos, eso sí, no vas a encontrar tantos: su fundadora, Rowena Ravenclaw, Garrick Ollivander, el mítico fabricante de varitas, Luna Lovegood, Trelawney, el cansino de Gilderoy Lockhart, Flitwick, Quirrell… y poco más. Ni protagonistas de spin-offs, ni antagonistas, ni nada, lo cual, en mi opinión, abre las puertas a la libertad plena en Hogwarts Legacy, porque no tienes que estar a la sombra de nada ni de nadie. En cuanto a las cualidades principales de sus miembros, destacan la inteligencia, la sabiduría, la creatividad, y el ingenio. Si te mola estudiar, estás dentro.
Slytherin
Cerramos con la infame Slytherin, cuyo trasfondo ha sido un pelín maltratado en las películas, en el sentido de que en realidad no era para tanto. Siempre relacionada con los malos malosos, con la gentuza del mundo mágico, Slytherin más bien es la casa de la ambición maquiavélica, del fin justifica los medios y todo eso, por mucho que el autor florentino nunca dijera esto tal cual. Su sala común está en las mazmorras, bastante cerca de donde suceden todos los líos de magia oscura, por alguna extraña razón, y transmite tonalidades verdosas y cadavéricas debido al efecto del río que fluye encima de ella. Probablemente es la menos acogedora de las estancias comunes, aunque no por ello la menos interesante. La representación de Hogwarts Legacy no solo parece ser bastante fiel a la pluma de Rowling, sino que además es más sobria, más elegante de lo que cabría esperar.

En fin, todo lo que no tiene Slytherin de hospitalaria lo tiene de famosa, en tanto en cuanto de aquí han salido mil nombres que te sonarán a poco que hayas visto solo una de las adaptaciones cinematográficas: su fundador, Salazar Slytherin, Voldemort, Severus Snape (el mejor personaje de Harry Potter), los Malfoy, Bellatrix Lestrange, la insoportable Dolores Umbridge, la familia Black, a excepción de Sirius, un montón de Mortífagos de primera generación y hasta Merlín, en teoría el mejor mago de la historia, ahí, ahí con Dumbledore. De nuevo, otra lista donde sobran nombres, pero qué se le va a hacer. Los valores principales de Slytherin son el orgullo, la astucia, la ambición, la determinación y el instinto de autopreservación, motivo por el cual son los principales sospechosos siempre que pasa algo.
Seleccionar nuestra casa libremente, cada una con diferentes compañeros, opciones. La ambientación.
Falta comprobar si se podrá interactuar de verdad con las salas comunes o si serán meros decorados.
