Situación de la escena: psicológo acosado por un tipo con gafas, un hombre sin identificar en ropas menores y una secretaria asustada con tantos penes a su alrededor. Y sólo es lunes por la mañana. Gex observó a los dos invitados y comprendió que, pasando por alto detalles como el estado de consciencia y de vestimenta, eran muy parecidos.
- Hum, dos personas semejantes, esto me huele mal.
- Se te habrá pasado alguna pista.- dijo Gordon.
- ¿Quién será este tipo?
- Habrá algo en que no te has percatado....- sugirió Gordon
- Déjame que piense....
- No tardes...
- Hum, este tipo está desnudo, inconsciente y sin rasgos de violencia en sus carnes.
- No estaba acostumbrado a luchar contra humanos.- dijo Gordon.
Gex miró atónito a Gordon Freeman, luego al tipo sin conocimiento, se le encendió una bombilla metáforica, y con una sonrisa mitad complicidad mitad miedo toqueteó la cabeza de Gordon Freeman hasta quitarle el peluquín y descubrir un código de barras.
- Nos volvemos a ver, agente 47.- dijo Gex con tono artificial.
- Veo que sigues usando frases tópicas, y eso que el clon soy yo.
- No se puede crear un lema único en cada instante.- gruñó Gex por el reproche.
- Sí puedes hacerlo, pero eres perezoso, por eso no piensas.
- Así paso desapercibido.- dijo Gex para luego cambiar de tema, con mejor humor.- Bueno, hacía tiempo que no te veía, y me alegro, hasta cierto punto.
- Sí, eres un tipo agradable.- respondió él seriamente.
- Entonces el que está dormido es el auténtico Gordon Freeman, el mismo que se enfrenta a alienígenas, parásitos y otros seres para eliminar.
- Sí, le vi esperando en la puerta y aproveché para acercarme con sigilo y aplicarle cloroformo, después me puse su armadura y le metí en un armario.
-¿Pesa mucho?
- Qué va, es un hombre de ciencia y apenas tiene músculo.
- ¿Le dejaste al menos mentalmente sano para que pueda seguir con sus aventuras?
- No tiene importancia ese aspecto.
- Bueno, ¿y qué te trae por aquí?
- Mi misión es liquidarte, y tu cometido es morir.
- Ah, sí..se me olvidaba.
No se podía decir que esta amistad fuera muy profunda, sincera o ejemplar, pero existía un mínimo de respeto.
- En fin, lagarto, he venido aquí por encargo y estoy dispuesto a cumplirlo.
- ¡No, espera!- Gex buscó rápidamente-. No puedes matarme delante de un testigo, y menos de Gordon Freeman. ¡Te delatará!
- Está inconsciente.
-Oh, bueno, tienes razón... pero al estar en estado REM de sueño su subconsciente es más maleable y puedes traumatizarle de por mi vida con mi muerte.
- Aparte de cargarte varias teorías de Freud, dudo que este tipo se asuste por estas cosas, ha vivido mucho y matado más. Además no le importas.
- ¡NO, NO PUEDES ASESINARME POR... PORQUE SOY TU AMIGO!
El agente 47 movió lentamente una ceja, la que elija el lector.
- No tenemos ninguna amistad.
- Que sí, que la tenemos, el narrador lo dijo antes.
- El narrador se equivoca.
-No, es verdad, compartimos muchas cosas juntos... como el asalto a esa frutería de barrio...
- ¿Una frutería?- preguntó 47 perplejo
- O esa vez que me sacaron de la cárcel para recuperar el dinero de unos mafiosos y me encadenaron a ti, el psicópata, para que no me escapara. Al final salió todo bien y mi familia sobrevivió, pero resultó un poco decepcionante.
- Estás hablando de Kane y Lynch, unos conocidos míos que conociste...
- ¡En la fiesta de fin de año en tu guarida bajo tierra!
- De acuerdo, hemos compartido momentos alegres y distendidos, como esa fiesta que celebré por el aniversario de mi primer asiático mafioso asesinado en servicio. Por cierto, sigues sin devolverme un subfusil que me cogiste sin permiso.
- ¿Yo? ¿Y qué iba a hacer con un cacharro como ése?- preguntó Gex con voz natural mientras borraba disimuladamente una foto que estaba colgada en Internet en la que salía él desnudo y montado encima de un subfusil.
- También me acuerdo- siguió 47, que descubrió que recordar sucesos del pasado era divertido e incontrolable- cuando me acompañaste a la casa de José Luis Moreno disfrazados de albano-kosovares. Por cierto, el olor a alcohol de camuflaje sigue sin irse.
3
- Sí, fue divertido y educativo. Oye, ¿sabes algo de la Señora L.L?
- Se negó a pagar a la Agencia argumentando que ella era muy importante y famosa para pagar como los demás clientes.
3 - ¡Atención!, chiste generalizador y xenófobo. Si eres de esa zona o si
consumes alcohol desde el desayuno no sigas leyendo para no herir tu sensibilidad.