
iPad
Mac
PC
Entrevista al estudio español The Game Kitchen
Conoce The Last Door, la mayor revelación dentro del sector indie español.

0
0
0
The Last Door ha supuesto un empujón de popularidad para vosotros, ¿en qué habéis trabajado antes?
Es cierto que The Last Door nos ha puesto en el mapa en muchos sentidos. Sin embargo, The Last Door nace de la mano de una pequeña desarrolladora, The Game Kitchen, que lleva desde 2009 creando videojuegos, casi todos por encargo. Por lo tanto, al ser juegos para terceros, nuestro nombre nunca ha trascendido ni ha llegado a ser excesivamente conocido.
Por esa época también hicimos algún juego propio e incluso alcanzamos bastante éxito con uno de ellos. Éste es el caso de Rotor'scope que se llevó varios reconocimientos a nivel nacional e internacional. Éste se puede decir que fue el detonante que nos animó a dejar a un lado determinados trabajos para empezar proyectos que nos motivaran en un plano más personal. Y aquí es donde nace la semilla que luego se convertiría en The Last Door.
Lo retro está de moda y esa es una de las principales bazas del juego, especialmente en lo estético. ¿Tuvisteis algún otro tipo de diseño en mente?
Sí, es cierto. Nos hemos hartado de escuchárselo a nuestras madres y abuelas: No tires eso, que lo viejo siempre termina volviendo a estar de moda.
No sé si es una moda o un ciclo normal de las cosas, o una cuestión de nostalgia colectiva. El caso es que lo vemos en todos los ámbitos, no sólo en los videojuegos. Lo vemos en la moda, en el cine, la música, etc. Supongo que las cosas buenas vuelven, además hay que tener en cuenta que los creadores tienen sus propias referencias, mitos o ídolos que les influyeron en el pasado, así que no es extraño que, de alguna manera, esos géneros regresen, a veces mejorando el enfoque original, y a veces no.
Volviendo a The Last Door y a la pregunta. Te diría que no, que no pensamos en ningún otro tipo de diseño. Desde el principio tuvimos claro que queríamos hacerlo tal y como lo podéis ver hoy en día. Nos gusta este tipo de estética como forma de arte y de expresión y ya llevábamos tiempo barajándola como una posibilidad, aunque fue Enrique, nuestro Lead Artist, quien disparó primero y nos convenció al resto de apostar por el "pixel art".
Además encajaba en muchos sentidos; por un lado le daba al juego el aire retro que andábamos buscando y que te ayuda a viajar en el tiempo y a contextualizar el juego. Por otro lado, también vimos en este tipo de estética una oportunidad de maximizar la experiencia terrorífica que queríamos que sintiera el jugador. ¿Cómo? Bueno, cuando estábamos diseñando The Last Door, quisimos recrear las sensaciones que se tienen cuando estás leyendo una novela de terror, en la que tu imaginación juega un papel vital, ya que no hay referencias visuales y es el propio cerebro el que genera las imágenes y la sensación de peligro latente.
Es cierto que The Last Door nos ha puesto en el mapa en muchos sentidos. Sin embargo, The Last Door nace de la mano de una pequeña desarrolladora, The Game Kitchen, que lleva desde 2009 creando videojuegos, casi todos por encargo. Por lo tanto, al ser juegos para terceros, nuestro nombre nunca ha trascendido ni ha llegado a ser excesivamente conocido.
Por esa época también hicimos algún juego propio e incluso alcanzamos bastante éxito con uno de ellos. Éste es el caso de Rotor'scope que se llevó varios reconocimientos a nivel nacional e internacional. Éste se puede decir que fue el detonante que nos animó a dejar a un lado determinados trabajos para empezar proyectos que nos motivaran en un plano más personal. Y aquí es donde nace la semilla que luego se convertiría en The Last Door.
Lo retro está de moda y esa es una de las principales bazas del juego, especialmente en lo estético. ¿Tuvisteis algún otro tipo de diseño en mente?
Sí, es cierto. Nos hemos hartado de escuchárselo a nuestras madres y abuelas: No tires eso, que lo viejo siempre termina volviendo a estar de moda.
No sé si es una moda o un ciclo normal de las cosas, o una cuestión de nostalgia colectiva. El caso es que lo vemos en todos los ámbitos, no sólo en los videojuegos. Lo vemos en la moda, en el cine, la música, etc. Supongo que las cosas buenas vuelven, además hay que tener en cuenta que los creadores tienen sus propias referencias, mitos o ídolos que les influyeron en el pasado, así que no es extraño que, de alguna manera, esos géneros regresen, a veces mejorando el enfoque original, y a veces no.
Volviendo a The Last Door y a la pregunta. Te diría que no, que no pensamos en ningún otro tipo de diseño. Desde el principio tuvimos claro que queríamos hacerlo tal y como lo podéis ver hoy en día. Nos gusta este tipo de estética como forma de arte y de expresión y ya llevábamos tiempo barajándola como una posibilidad, aunque fue Enrique, nuestro Lead Artist, quien disparó primero y nos convenció al resto de apostar por el "pixel art".
Además encajaba en muchos sentidos; por un lado le daba al juego el aire retro que andábamos buscando y que te ayuda a viajar en el tiempo y a contextualizar el juego. Por otro lado, también vimos en este tipo de estética una oportunidad de maximizar la experiencia terrorífica que queríamos que sintiera el jugador. ¿Cómo? Bueno, cuando estábamos diseñando The Last Door, quisimos recrear las sensaciones que se tienen cuando estás leyendo una novela de terror, en la que tu imaginación juega un papel vital, ya que no hay referencias visuales y es el propio cerebro el que genera las imágenes y la sensación de peligro latente.
Información del juego
Fecha de lanzamiento: 20 de mayo de 2014
Desarrollado por:
The Game Kitchen