Quién teme al lobo feroz

Telltale Games lleva tiempo intentando reinventar el género de la aventura gráfica. Desde sus primeros pinitos en la serie Sam & Max, esta empresa ha estado haciendo avanzar un género que se creía muerto; pero de todos sus méritos, el cénit de la producción llegó el año pasado con The Walking Dead, un juego que cosechó grandes éxitos entre el público y la crítica, y que viene a ser la plantilla básica de todos los nuevos proyectos de la empresa, incluyendo The Wolf Among Us. Lo cierto es que las mecánicas clásicas de la aventura gráfica están muy pasadas de moda: combinar el objeto Y con el objeto X para usarlo en punto A para abrir la puerta B no es algo que pueda competir con la industria millonaria de los juegos actuales, es por ello que Telltale se centra en lo que hacía realmente memorables estas aventuras: el guión. The Wolf Among Us sigue esta filosofía, es decir, minimiza la dificultad de los puzzles- a estas alturas no podemos ni considerarlos puzzles- pero potencia las virtudes del guión, invierte sus recursos en lograr historias ramificadas que reflejen las consecuencias de nuestras decisiones.

Dicho y hecho, The Wolf Among Us es prácticamente idéntico a The Walking Dead es sus mecánicas, y aunque las escenas de acción han sido refinadas para resultar más ágiles (aunque siguen siendo básicamente los QTE de siempre) no hay nada a nivel jugable que no hayamos disfrutado antes. Esto, por supuesto, no es un problema, no hace falta cambiar lo que ya funciona y este juego sigue la estela de profesionalidad que ya dejó marcada The Walking Dead.

En este caso, Telltale se ha basado en la serie de cómics Fables, creada por Bill Willingham y publicada por Dark Horse desde el año 2002. En este caso, la trama se remonta a varias décadas antes del inicio de los cómics, y ocurre en el Nueva York de los años 80. El reino de las fábulas ha sido destruído, y los supervivientes deben refugiarse en el mundo humano, a menudo utilizando hechizos que disimulen su aspecto real. El protagonista de la trama es Bigby, es decir Big Bad Wolf, el Lobo Feroz; convertido ahora en un sheriff-detective fumador y duro al más puro estilo hard boiled. En este sentido, The Wolf Among Us tiene muchas influencias del género noir; detrás del velo de la fantasía se oculta la urdimbre típica de una historia de detectives. Esto es un arma de doble filo; por un lado nos ofrece un escenario familiar para una trama que ocurre en un contexto extraño e imaginativo. Por otro lado, peca de aferrarse demasiado a las estructuras de su género. Un asesinato, un detective solitario, una femme fatale, un misterio que tiene que ver con las estructuras de poder de una sociedad secreta... y en esto Bigsby cumple las reglas. En este sentido, es un personaje familiar pero no especialmente original, y se ajusta bastante al arquetipo del poli rudo que tan bien funciona, pero que hemos visto otras veces.

Por otro lado, la trama es muy interesante, a pesar de su estructura clásica. Este primer episodio es una introducción perfecta al mundo de Fables, y aquellos que no han leído los cómics van a descubrir un mundo totalmente nuevo. Sin embargo, los que ya estamos familiarizados con la serie contamos con ventajas y desventajas. Por un lado, conocemos el mundo en que ocurre todo y sus personajes, pero por otro sabemos dónde se van a encontrar muchos de los personajes unas décadas después, lo que arruina el suspense de posibles muertes y tragedias: ya sé qué personajes están fuera de todo riesgo.

The Wolf Among Us sigue siendo una experiencia recomendable, hayas leído los cómics o no. Con grandes actuaciones de voz y una dirección artística que hace brillar el apartado técnico con colores de neón y sombras pronunciadas, este juego es una gozada tanto a nivel visual como dramático. No sé si Telltale será capaz de mantener el nivel en los siguientes episodios, o si serán capaces de mantener la intriga, pero como primera aproximación al extraño y fascinante mundo de las fábulas, el juego cumple de sobras.