PlayStation 3
La defensa es lo primero
Ratchet&Clank vuelven de su parón con una propuesta muy específica de tower defense.
Por Andrés JC,
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Hace varios años que no le vemos el pelo a Ratchet y a su compañero Clank si exceptuamos las reediciones de PS3, aunque es de suponer que Insomniac estaba demasiado ocupada con la serie Resistance y ahora con Fuse, su primer título multiplataforma. Sin embargo, para redimirse, probablemente cierren la generación con esta nueva entrega, Q Force, que se desmarca de lo anterior para ofrecer una propuesta verdaderamente original.
La intención de Ratchet&Clank: Q Force es pretendidamente honesta. El precio de lanzamiento de 20€, alrededor de 50€ más barato de lo habitual, nos lo confirma. Y es que lo que han pretendido los chicos de Insomniac es, no sólo revitalizar la serie, sino también hacer un juego dirigido para un público muy concreto. Hablamos de un título orientado hacia el multijugador, tanto local como online. Estamos ante un tower-defense vertebrado con la acción plataformera clásica de la serie.
Los medios técnicos que se han puesto sobre la mesa de desarrollo han sido los justos y necesarios para poder llevar a cabo la idea. Modelados gráficos de anteriores entregas, jugabilidad totalmente calcada a la clásica y con un par de retoques por aquí, otro par de refinado de texturas por allá, tenemos toda la mecánica de juego lista y un rendimiento gráfico más que aceptable. Pues lo que nos importa en Q Force no es mejorar cuantitativamente lo anterior sino ofrecer un cambio cualitativo: una nueva experiencia de juego.
Y lo cierto es que lo han conseguido. El tower-defense es uno de los géneros que más innovación está obteniendo en esta generación, e Insomniac lo ha recreado a su manera. Con un magnífico resultado. Cada nivel consta de una "fortaleza" que tenemos que defender, la cual está formada por una serie de nodos. Estos nodos se reparten por todo nuestro territorio y tenemos que defenderlos a toda costa, con torretas, minas y barreras, ante los ataques enemigos. Hasta ahí lo que se podría esperar de un juego de este estilo.
Lo nuevo viene cuando tenemos que conquistar la fortaleza enemiga, que es muy diferente a la nuestra. Para conquistarla, tenemos un escenario repleto de elementos con los que tendremos que interactuar, más allá de los límites de nuestra fortaleza. Utilizando a cualquiera de los personajes disponibles de la serie (como Clank o el Capitán Quark), nos encontraremos varios enemigos por el mapeado que nos obsequiarán con tokens para mejorar las defensas de nuestra fortaleza. También encontraremos fases plataformeras, con más enemigos y pequeños bosses que tendremos que superar para alcanzar diferentes objetivos: todos ellos relacionados con reforzar nuestro armamento o debilitar la fortaleza enemiga. Una vez hemos debilitado la fortaleza al máximo, tenemos que entrar en ella (de nuevo con otra fase plataformera y enemigos), derrotar al jefe que allí se encuentra, y ganar la partida. Entre todas estas pequeñas incursiones por el mapeado, de vez en cuando, oleadas de enemigos atacarán nuestra base. Es entonces cuando tendremos que ir rápidamente hacia allí para defenderla, tanto con torretas y minas, como con nuestras propias manos.
El concepto funciona a las mil maravillas. Es tremendamente divertido porque tanto las fases de Ratchet&Clank clásico, como las fases de defender la fortaleza, son acertadas. El armamento disponible es muy amplio (y ya visto en otros juegos de la serie) así que las posibilidades son interesantes. La única pega, pero por desgracia una pega muy importante, es que hay muy pocos niveles, y además la dificultad entre ellos no está para nada ajustada. Por lo que, si no vamos a jugar en multijugador, la vida útil del juego se reduce muchísimo. En cuanto al multijugador en sí, tenemos la posibilidad de jugar tanto cooperativo como competitivo. El cooperativo consiste en compartir la experiencia con otro jugador, mientras que el competitivo se basa en disputarse una serie de elementos que hay por el escenario para garantizar nuestras defensas y por supuesto defender nuestra base cuando toque. Funciona tan bien o mejor que el modo estándar y desde luego ofrece unos piques nada despreciables.
Conclusiones
Q Force sabe que es un conejillo de indias y lo aprovecha. Su fórmula es explosiva, pero es una lástima de Insomniac le haya dado un enfoque tan poco profundo. Sus recursos técnicos son muy ajustados y el contenido muy escaso, lo que es un incordio, pero a la vez es comprensible, al ser una apuesta tan relativamente arriesgada. Por suerte su precio de salida es irrisorio por lo que, al menos, queda en parte justificado. Esperemos que esta fórmula se explote más en el futuro.
La intención de Ratchet&Clank: Q Force es pretendidamente honesta. El precio de lanzamiento de 20€, alrededor de 50€ más barato de lo habitual, nos lo confirma. Y es que lo que han pretendido los chicos de Insomniac es, no sólo revitalizar la serie, sino también hacer un juego dirigido para un público muy concreto. Hablamos de un título orientado hacia el multijugador, tanto local como online. Estamos ante un tower-defense vertebrado con la acción plataformera clásica de la serie.
Los medios técnicos que se han puesto sobre la mesa de desarrollo han sido los justos y necesarios para poder llevar a cabo la idea. Modelados gráficos de anteriores entregas, jugabilidad totalmente calcada a la clásica y con un par de retoques por aquí, otro par de refinado de texturas por allá, tenemos toda la mecánica de juego lista y un rendimiento gráfico más que aceptable. Pues lo que nos importa en Q Force no es mejorar cuantitativamente lo anterior sino ofrecer un cambio cualitativo: una nueva experiencia de juego.
Y lo cierto es que lo han conseguido. El tower-defense es uno de los géneros que más innovación está obteniendo en esta generación, e Insomniac lo ha recreado a su manera. Con un magnífico resultado. Cada nivel consta de una "fortaleza" que tenemos que defender, la cual está formada por una serie de nodos. Estos nodos se reparten por todo nuestro territorio y tenemos que defenderlos a toda costa, con torretas, minas y barreras, ante los ataques enemigos. Hasta ahí lo que se podría esperar de un juego de este estilo.
Lo nuevo viene cuando tenemos que conquistar la fortaleza enemiga, que es muy diferente a la nuestra. Para conquistarla, tenemos un escenario repleto de elementos con los que tendremos que interactuar, más allá de los límites de nuestra fortaleza. Utilizando a cualquiera de los personajes disponibles de la serie (como Clank o el Capitán Quark), nos encontraremos varios enemigos por el mapeado que nos obsequiarán con tokens para mejorar las defensas de nuestra fortaleza. También encontraremos fases plataformeras, con más enemigos y pequeños bosses que tendremos que superar para alcanzar diferentes objetivos: todos ellos relacionados con reforzar nuestro armamento o debilitar la fortaleza enemiga. Una vez hemos debilitado la fortaleza al máximo, tenemos que entrar en ella (de nuevo con otra fase plataformera y enemigos), derrotar al jefe que allí se encuentra, y ganar la partida. Entre todas estas pequeñas incursiones por el mapeado, de vez en cuando, oleadas de enemigos atacarán nuestra base. Es entonces cuando tendremos que ir rápidamente hacia allí para defenderla, tanto con torretas y minas, como con nuestras propias manos.
El concepto funciona a las mil maravillas. Es tremendamente divertido porque tanto las fases de Ratchet&Clank clásico, como las fases de defender la fortaleza, son acertadas. El armamento disponible es muy amplio (y ya visto en otros juegos de la serie) así que las posibilidades son interesantes. La única pega, pero por desgracia una pega muy importante, es que hay muy pocos niveles, y además la dificultad entre ellos no está para nada ajustada. Por lo que, si no vamos a jugar en multijugador, la vida útil del juego se reduce muchísimo. En cuanto al multijugador en sí, tenemos la posibilidad de jugar tanto cooperativo como competitivo. El cooperativo consiste en compartir la experiencia con otro jugador, mientras que el competitivo se basa en disputarse una serie de elementos que hay por el escenario para garantizar nuestras defensas y por supuesto defender nuestra base cuando toque. Funciona tan bien o mejor que el modo estándar y desde luego ofrece unos piques nada despreciables.
Conclusiones
Q Force sabe que es un conejillo de indias y lo aprovecha. Su fórmula es explosiva, pero es una lástima de Insomniac le haya dado un enfoque tan poco profundo. Sus recursos técnicos son muy ajustados y el contenido muy escaso, lo que es un incordio, pero a la vez es comprensible, al ser una apuesta tan relativamente arriesgada. Por suerte su precio de salida es irrisorio por lo que, al menos, queda en parte justificado. Esperemos que esta fórmula se explote más en el futuro.
Alternativas
Los Ratchet&Clank originales.
Su mezcla de géneros: Tower-defense y el Ratchet&Clank clásico.
Muy escaso en contenido.
El concepto es fantástico, pero no se explota lo suficiente. Podría haber sido un nuevo referente en el tower-defense: es verdaderamente divertido.