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Análisis de Pikmin 1+2, una invitación al jardín de Miyamoto
Nintendo Switch

Análisis de Pikmin 1+2, una invitación al jardín de Miyamoto

Revisamos el inicio de la incomparable franquicia Pikmin, ahora en Switch

Por Andrés JC,
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Muchas cosas han cambiado desde 2001, los videojuegos tienen metas más elevadas, los jugadores buscan experiencias más variadas que nunca y algunas franquicias parecen acaparar casi todo el protagonismo. Entre ellas, algunas de Nintendo, que en época de GameCube jamás habría soñado con vender 30 millones de un Zelda o conseguir mantener en lo más alto un Mario Kart durante 10 años. Lo que no ha cambiado tanto es Pikmin, que promedia una entrega cada lustro y se mantiene muy muy cerca de los fundamentos con los que nació. Unos orígenes que ahora ha recuperado Nintendo en su Switch.

Una historia floral y salvaje

Pikmin es uno de esos juegos en los que nos podemos equivocar catastróficamente si lo juzgamos por su apariencia. Sus protagonistas son seres adorables, el mundo es colorido y floral, la historia es un bonito cuento de colaboración, ¿verdad? Alguien que no esté muy involucrado pensará que es un juego relajante, pausado y amigable. Uno como tantos ha hecho Nintendo, y se llaman Animal Crossing o Pokémon. Ese sería un grave error, por supuesto. Pikmin no es lo que parece.



La historia de Pikmin está marcada por las amenazas. Por ejemplo, el contrarreloj, que nos amenaza siempre. En Pikmin (renombrado ahora como Pikmin 1), tomamos el papel de Olimar, un habitante del planeta Hocotate que tiene un accidente y aterriza en algo muy parecido al planeta Tierra. Su sistema de supervivencia se va a acabar en 30 días, ya que el oxígeno es venenoso para él. Empieza la cuenta atrás para escapar de esta trampa mortal, y el reloj nunca se detiene. En Pikmin 2 no hay tiempo límite, y la experiencia es más amable, pero a cambio la supervivencia es mucho más difícil.

«Pikmin produce una inquietud similar a Majora's Mask»


Introducir una mecánica temporal es una decisión muy arriesgada, y es especialmente agresiva en Pikmin 1. Provoca una sensación de estrés constante, en especial cuando es la primera vez que jugamos. Pikmin produce una inquietud similar a Majora's Mask, un juego con el que solo se lleva un año de diferencia. A la Nintendo de principios de los 2000 no le temblaba el pulso para dar luz verde juegos incómodos y desafiantes, pues de ahí salieron también Super Mario Sunshine, F-Zero GX o Fire Emblem, que se cuentan entre los más difíciles de sus respectivas franquicias. Hoy en día son más conservadores o añaden opciones que suavizan mucho la experiencia.



En Pikmin 1, durante los 30 días, Olimar tiene la tarea de recorrer cuatro niveles repletos de enemigos y ayudarse de los pikmin para recuperar las piezas de su nave. La aventura empieza con una clara linealidad hasta que encontramos cada tipo de pikmin, y después nos suelta de la mano y nos exige tomar decisiones. ¿Cuál es la siguiente pieza que deberíamos coger? ¿Cuál es el camino menos arriesgado? ¿Cuántos pikmin son suficientes para derrotar a ese enemigo? ¿Debería invertir tiempo en cosechar más pikmin? Estas decisiones convierten el juego en una gestión constante de recursos: el tiempo y nuestro escuadrón de pikmin.

«En Pikmin 1, durante los 30 días, Olimar tiene la tarea de recorrer cuatro niveles repletos de enemigos y ayudarse de los pikmin para recuperar las piezas de su nave»


Pero además lo "adorable" se acaba cuando vemos que para sobrevivir, tenemos que luchar contra temibles criaturas que son capaces de machacar nuestro equipo pikmin de un pestañeo. Es necesario derrotarlas y utilizar los cadáveres para cosechar más pikmin. Nuestros amigos de colores van a caer en el combate, se van a ahogar o se van a caer al vacío más pronto que tarde, y tendremos que buscar refuerzos. Los pikmin sobreviven siempre porque son capaces de llevar a cuestas enemigos muertos o pastillas de colores que salen de otras plantas, y que se emplean para crear más pikmin. En muchos aspectos, Pikmin es un juego muy naturalista, y también lo podemos ver en los detalles. En Pikmin 2 cada escenario representa una estación del año, en un estilo muy típico japonés; ciertos enemigos son carroñeros y aprovechan que hemos derrotado a otras criaturas para llevarse su cadáver.



De pronto, Pikmin ya no es tan amigable, ni tan relajante como parecía, ¿verdad? Además, estas dos primeras entregas de la serie son más duras de jugar que las últimas. Los controles han sido ligeramente actualizados para ofrecer una experiencia más agradable: ahora es posible controlar la cámara con el segundo stick, y podemos apuntar dónde lanzar los pikmin moviendo el mando. Pero la base de la jugabilidad es la misma, y requiere mucho aprendizaje y bastante habilidad para dominarla. Lo más normal es que en una primera partida, encontremos situaciones en las que perder todos los pikmin. Algunos enemigos o trampas del juego son devastadoras y pueden aniquilar decenas de pikmin de un plumazo. Parte de aprendizaje se hace a la vieja usanza: carga la partida y vuelve a repetir el día de juego, con el objetivo de hacerlo mejor.

El tiempo a través de Pikmin 1 y Pikmin 2

Han pasado dos décadas y ahora podemos ver con otros ojos estos dos juegos, en especial tras haber disfrutado de una tercera entrega que refina mucho la jugabilidad. ¿Vale la pena volver a estos dos primeros títulos? No cabe duda de que el escollo más importante que un jugador nuevo va a encontrar es la jugabilidad. Además de tener un control muy particular al que hay que acostumbrarse, tanto Pikmin 1 como Pikmin 2 tienen ciertos defectos que no han sido solucionados en este remaster. Así que, en cierto modo, aquí vamos a vivir la experiencia original, para bien y para mal.

«Cada movimiento que hacemos es importante, estamos tomando decisiones estratégicas constantemente»


El principal atractivo de Pikmin 1 es su diseño de juego arcade. Es una aventura corta, que como mucho dura 4 horas, y nos cuenta una historia compacta y muy divertida. Olimar es un personaje que no habla, no gesticula y apenas tiene rasgos distintivos, pero su personalidad es incomparable. A través de sus comentarios y diario de bitácora podemos conocer cómo piensa, leer sus miedos y sus esperanzas, y también sus hilarantes observaciones. Este es un mundo desconocido para él, y la presión de escapar en 30 días conforma un desafío poco habitual en un videojuego. Cada movimiento que hacemos es importante, estamos tomando decisiones estratégicas constantemente: utiliza una parte del grupo para derribar una puerta, al mismo tiempo derrota a un enemigo que está en el camino a la nave, y utiliza los recursos de alrededor para recomponer las bajas. El objetivo principal, encontrar piezas de la nave, es muy gratificante, así como descubrir la manera de derrotar a cada enemigo.



La contrapartida es que la dificultad puede ser abrumadora. Aprender cómo manejar a los pikmin requiere de mucha prueba y error, ya que se comportan de forma un tanto particular. En este primer juego, además, la IA de cada pikmin es muy imprecisa, es habitual que se queden atascados por el escenario, o que hagan cosas diferentes a lo que queremos. El juego permite repetir cada fase para perfeccionar el resultado y así no agotar el tiempo limitado de aventura, pero es un peaje que puede resultar duro para los jugadores menos pacientes. Por supuesto, si jugamos ignorando el tiempo y agotamos los 30 días sin conseguir las piezas de la nave necesarias, el juego termina con un final malo donde Olimar no se salva. Sin embargo, con la debida práctica es bastante asequible conseguir el 100% del juego en la mitad el tiempo disponible.

«[Pikmin 2] es una aventura cuatro veces más larga, con 200 tesoros por recoger a diferencia de las 30 piezas del original, y también hay dos tipos de pikmin más que amplían la complejidad del juego»


Pikmin 2 eliminó el límite temporal y, en consecuencia, la presión constante de tener que hacerlo todo con prisa. Continúa la historia del anterior juego, con un argumento algo irrelevante: Olimar vuelve al planeta de los pikmin por decisión propia para recuperar tesoros y poder venderlos en Hocotate, y así pagar la deuda de su empresa. En el viaje ahora le acompaña Luis, un compañero de empresa que también es jugable. Lo mejor de la segunda entrega es que muchos de los problemas jugables del primero se han solucionado y hay mucho más por explorar, los pikmin son más fáciles de manejar y hay tiempo de sobra para recoger cada tesoro. Además es una aventura cuatro veces más larga, con 200 tesoros por recoger a diferencia de las 30 piezas del original, y también hay dos tipos de pikmin más que amplían la complejidad del juego.



En general, Pikmin 2 es mejor entrega que el primero. Se nota que Nintendo tuvo más tiempo para desarrollarlo, y pudo echar toda la carne en el asador. La curiosidad por descubrir este mundo de los pikmin es incomparable, ahora sentimos que salimos de expedición a lo desconocido y no sabemos lo que encontrar: quizá un nuevo enemigo gigante, quizá un tesoro inesperado, o un nuevo camino hacia una cueva. Los tesoros que recuperamos son objetos cotidianos de nuestro día a día, como frutas, juguetes o joyas, ante los cuales Olimar hace observaciones de lo más ocurrentes. Es una aventura más agradable de jugar, pero no por ello abandona el desafío, más bien lo transforma. Ahora lo más difícil de este juego es la supervivencia en las cuevas subterráneas, que son mazmorras al estilo Diablo.

«Entrar en la cueva es entrar en un duro desafío por sobrevivir, y cualquier error puede causar bajas muy importantes en el equipo de pikmin»


Las cuevas de Pikmin 2 han sido objeto de encarnizado debate desde hace años. Son la parte menos Pikmin de Pikmin: una mazmorra lineal, dividida en varias plantas, sin límite de tiempo, donde no se pueden plantar más pikmin de los que entran al principio. Entrar en la cueva es entrar en un duro desafío por sobrevivir, y cualquier error puede causar bajas muy importantes en el equipo de pikmin, que pueden hacer las siguientes plantas de la cueva mucho más difíciles o directamente imposibles. Superar una cueva es muy gratificante, ya que es un reto que puede durar entre diez minutos y una hora, pero también es cierto que estas fases abandonan la gestión y puzzles característicos de la serie, y se centran sobre todo en el combate y la recolección. En algunas cuevas, la dificultad abusa de ser tramposa, y requiere mucha prueba y error.

Un legado que está de actualidad

Con el lanzamiento de Pikmin 1+2 se hace posible jugar a todos los títulos principales de la serie en Switch, todos ellos en formato físico. Nintendo ha llevado a cabo una estrategia similar con Bayonetta, Xenoblade Chronicles y Mario (si olvidamos por un momento Galaxy 2) de modo que sus franquicias ahora viven en un mismo sistema. En el caso de Pikmin 1+2, la remasterización no es tan elaborada como Xenoblade Chronicles: Definitive Edition ni Metroid Prime Remastered. Encontramos una versión adaptada a la resolución actual y algunos cambios en el control, pero a grandes rasgos, son los mismos juegos. Lo peor de la remasterización es el torpe rediseño de los menús, que en vez de estar adaptados correctamente al formato panorámico, en muchos casos se han estirado a lo bruto.

Las versiones que ha elegido Nintendo como base para Pikmin 1+2 son las de Wii, que a su vez eran ports de GameCube con algunos cambios menores y la opción de usar control por movimiento. Este control también está disponible ahora, así como algunos cambios en Pikmin 2 que cambian la apariencia de ciertos objetos en el juego: en 2003 aparecían marcas como Duracell o Danone, que han sido reemplazadas por marcas genéricas. Por lo demás, encontramos los mismos gráficos de principios de los 2000, los mismos modos de juego, y un control mejorado. Exprimir el contenido de ambos títulos nos puede llevar a las 30 horas de juego, aproximadamente, y si te gusta el speedrunning, aquí encontrarás un reto muy divertido.

«Encontramos los mismos gráficos de principios de los 2000, los mismos modos de juego, y un control mejorado»


20 años después, la serie Pikmin se mantiene única en su especie. Algunos han intentado utilizar ciertos elementos, como The Wonderful 101 o Tinykin, para crear su propia fórmula con las mismas raíces que Pikmin. Sin embargo, es indudable que las aventuras de Olimar tienen una personalidad inconfundible; nada parecido a lo que ha ocurrido con otras series como Metroid, donde han salido miles de inspiraciones. Pikmin es, sencillamente, un juego muy específico con un sistema de juego excéntrico, junta muchos géneros a la vez y es muy difícil de clasificar. Nintendo no ha conseguido el éxito comercial con esta serie que sí ha obtenido con otras, aunque quizá eso cambie con el próximo Pikmin 4. La compañía japonesa sabe que la perseverancia, a veces, sale muy rentable: franquicias como Animal Crossing o Luigi's Mansion también empezaron en GameCube y tardaron unos años en pegar el pelotazo comercial, una trayectoria que podría ocurrir también con Pikmin. Tenga éxito comercial o no, es innegable que estos juegos destilan calidad en muchos aspectos.

Conclusiones

Dos de los juegos más celebrados de GameCube llegan a Switch con pequeñas mejoras, pero sin el tratamiento de lujo que hemos visto en otros títulos como Metroid Prime Remastered. El comienzo de la serie Pikmin es delicioso, brillante y también bastante imperfecto. Problemas no solucionados con la IA de los pikmin o con un control que no es del todo preciso son los mayores impedimentos que vamos a encontrar en Pikmin 1+2, que con la debida paciencia y habilidad sabe recompensar con creces nuestro empeño. Sobrevivir a este extraño planeta junto a un escuadrón de criaturas diminutas sigue siendo una bomba de diversión.

Jugado en Switch. Copia digital proporcionada por Nintendo.


Análisis de Pikmin 1+2 para Switch: Análisis de Pikmin 1+2, una invitación al jardín de Miyamoto
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Alternativas
Pikmin 3, Wonderful 101, Tinykin
Sistema de juego único. Carisma desbordante. Pequeñas mejoras
Interfaz remasterizada con pereza. Sigue arrastrando bugs de antaño
Puntuación
uVeJuegos
80
Un fragmento irrepetible de la historia de Nintendo, ligeramente rematado para poder disfrutarlo mejor en la actualidad

Información del juego

Pikmin 1+2

Nintendo Switch

Fecha de lanzamiento: 21 de junio de 2023
Puntuación
uVeJuegos
80

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