PlayStation 2
Los demonios de Capcom
Uno de los primeros grandes títulos en aparecer para PS2, con una jugabilidad muy parecida a la de la saga Resident Evil pero ambientada en el Japón feudal.
Por Sefirot,
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No es otro Resident Evil
La primera parte de la trilogía Onimusha tuvo unos comienzos bastante moviditos: empezó a gestarse hace varios años en la 64 bits de Nintendo, para después pasar a ser un proyecto de PlayStation, y finalmente salir en PS2. Capcom quería empezar a lo grande en la nueva máquina de Sony, y por ello decidió hacer una fácil conversión de PSX a PS2. Y digo fácil porque, al tratarse de un juego con gráficos prerrenderizados, simplemente se limitaron a aumentar la resolución y el detalle de estos, así como el de los personajes y enemigos. Y la verdad es que les salió bien la jugada a los de Capcom: Onimusha se convirtió en uno de los primeros hits de PS2, vendiendo más de 1 millón de copias en Japón y arrasando en Estados Unidos.
La clave de su éxito fue el ofrecer un sistema de juego conocido por todos, muy parecido al de la saga Resident Evil, pero con algunos elementos bastante innovadores. Uno de ellos es la época en la que se sitúa la acción, el Japón feudal, que hace que manejemos a un samurai y nos olvidemos de las destructivas armas de fuego de la saga de los zombies, en favor de las espadas. Además entraba en juego el elemento mágico, con la posibilidad de realizar potentes magias. Con todo esto Capcom pretendía desmarcarse un poco de sus anteriores survival horror y ofrecer un soplo de aire fresco al género, y a fe que lo consiguieron.
Argumento
Año 1560. Yoshimoto Imagawa y Nobunaga Oda, jefes de 2 de los clanes más famosos de Japón, se enfrentan en una sangrienta batalla en Okehazama, luchando por la unificación de Japón. Las tropas de Nobunaga, de tan sólo 2.000 hombres, vencen a las de Imagawa, pero justo en el momento en el que Oda celebra la victoria su cuello es atravesado por una flecha disparada por uno de los hombres de Imagawa. Observando la escena desde una colina cercana se encuentra Samanosuke Akechi, el héroe de esta aventura.
Un año después de la batalla de Okehazama, extrañas desapariciones se suceden en el Castillo de Inabayama. La princesa Yuki, alarmada por la situación, decide pedir ayuda a Samanosuke. Pero él llega demasiado tarde: la princesa ha sido raptada. Cuando Samanosuke se dispone a ir a su rescate se percata de la llegada de unos demonios a la zona, liderados por nada menos que Nobunaga Oda, el cual ha hecho un pacto con Fortinbras, Rey de los demonios, para volver del infierno. Nuestra misión consistirá en rescatar a la princesa antes de que sea sacrificada, y para ello contaremos con la ayuda de Kaede, una ninja.
El argumento de Onimusha está basado en un hecho real, ya que la batalla de Okehazama (la cual veremos en la intro del juego perfectamente recreada) sucedió en verdad y es una de las más famosas de Japón. Eso sí, la parte del pacto de Nobunaga con Fortinbras es ficción, y es la excusa para ver centenares de demonios en el juego, así como el T-Virus lo fue para ver zombies y demás criaturas en la otra saga estrella de Capcom, Resident Evil.
La primera parte de la trilogía Onimusha tuvo unos comienzos bastante moviditos: empezó a gestarse hace varios años en la 64 bits de Nintendo, para después pasar a ser un proyecto de PlayStation, y finalmente salir en PS2. Capcom quería empezar a lo grande en la nueva máquina de Sony, y por ello decidió hacer una fácil conversión de PSX a PS2. Y digo fácil porque, al tratarse de un juego con gráficos prerrenderizados, simplemente se limitaron a aumentar la resolución y el detalle de estos, así como el de los personajes y enemigos. Y la verdad es que les salió bien la jugada a los de Capcom: Onimusha se convirtió en uno de los primeros hits de PS2, vendiendo más de 1 millón de copias en Japón y arrasando en Estados Unidos.
La clave de su éxito fue el ofrecer un sistema de juego conocido por todos, muy parecido al de la saga Resident Evil, pero con algunos elementos bastante innovadores. Uno de ellos es la época en la que se sitúa la acción, el Japón feudal, que hace que manejemos a un samurai y nos olvidemos de las destructivas armas de fuego de la saga de los zombies, en favor de las espadas. Además entraba en juego el elemento mágico, con la posibilidad de realizar potentes magias. Con todo esto Capcom pretendía desmarcarse un poco de sus anteriores survival horror y ofrecer un soplo de aire fresco al género, y a fe que lo consiguieron.
Argumento
Año 1560. Yoshimoto Imagawa y Nobunaga Oda, jefes de 2 de los clanes más famosos de Japón, se enfrentan en una sangrienta batalla en Okehazama, luchando por la unificación de Japón. Las tropas de Nobunaga, de tan sólo 2.000 hombres, vencen a las de Imagawa, pero justo en el momento en el que Oda celebra la victoria su cuello es atravesado por una flecha disparada por uno de los hombres de Imagawa. Observando la escena desde una colina cercana se encuentra Samanosuke Akechi, el héroe de esta aventura.
Un año después de la batalla de Okehazama, extrañas desapariciones se suceden en el Castillo de Inabayama. La princesa Yuki, alarmada por la situación, decide pedir ayuda a Samanosuke. Pero él llega demasiado tarde: la princesa ha sido raptada. Cuando Samanosuke se dispone a ir a su rescate se percata de la llegada de unos demonios a la zona, liderados por nada menos que Nobunaga Oda, el cual ha hecho un pacto con Fortinbras, Rey de los demonios, para volver del infierno. Nuestra misión consistirá en rescatar a la princesa antes de que sea sacrificada, y para ello contaremos con la ayuda de Kaede, una ninja.
El argumento de Onimusha está basado en un hecho real, ya que la batalla de Okehazama (la cual veremos en la intro del juego perfectamente recreada) sucedió en verdad y es una de las más famosas de Japón. Eso sí, la parte del pacto de Nobunaga con Fortinbras es ficción, y es la excusa para ver centenares de demonios en el juego, así como el T-Virus lo fue para ver zombies y demás criaturas en la otra saga estrella de Capcom, Resident Evil.
La escena de la intro es realmente impresionante
Samanosuke protegiendo a la princesa Yuki
Aquí podemos ver a Kaede, la compañera de Samanosuke, en plena acción
Información del juego
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