El origen de las serpientes

Para curarnos de nuestras desgracias contaremos con la opción de "Cura". Cada vez que un enemigo nos hiera o suframos algún percance, deberemos acudir a esta opción para recuperarnos de nuestras desdichas. Según el tipo de lesión, diferente será el tipo de cura que tengamos que utilizar. Por ejemplo, si sufrimos el impacto de un disparo, primeramente tendremos que extraer la bala de nuestro cuerpo con un cuchillo para posteriormente desinfectar y vendar la zona. Si caemos desde un lugar alto o algún enemigo nos da un impacto fuerte se nos fracturará un hueso y para volverlo a colocar habrá que implantar una venda y una tablilla para mantenerlo erguido. En el apartado de cura también habrá lugar para las lesiones internas, para así poder tratar por medio de inyecciones ya sean envenenamientos, indigestiones, dolores de estómago o resfriados.

Para darle más intensidad, en ocasiones mientras estemos comiendo o curándonos las heridas, veremos un vídeo de cómo se las apaña Snake haciéndolo. Además, si llevamos un tiempo sin jugar, la comida se pudrirá, pero las heridas se curarán automáticamente debido al paso del tiempo. Estas tres nuevas incorporaciones a la saga dan sin duda un nuevo aire al apartado jugable con un componente que podría considerarse de juego de rol. Quizás haya gente que pueda pensar que estas novedades no pintan nada en un Metal Gear, pero son sin duda bocanadas de aire fresco que hacen al juego más abierto y con más variedad.

Centrándonos el apartado puramente jugable se ha añadido una novedad que es bastante interesante. Hablamos del CQC (Close Quarters Combat), sistema de lucha que inventaron juntos Snake y The Boss, por medio de un cuchillo de supervivencia y un arma de mano, el cual nos servirá de gran ayuda para derrotar a los terroristas enemigos. Con él, si pillamos de espaldas a un enemigo, tendremos un menú de posibilidades a la carta para hacer con él lo que queramos. Desde agarrarle por el cuello para interrogarle (algo bastante aconsejable para obtener información extra), acuchillarle, tirarle al suelo y dejarle inconsciente, inmovilizarlo apuntándole con el arma...en fin, os aconsejemos que probéis todas las características que tiene el CQC, porque aparte de ser divertidas darán mucha variedad al título.

El equipo de Kojima, en esta nueva entrega ha querido centrarse más en el apartado jugable, reduciendo en gran cantidad el considerable número de escenas cinemáticas vistos en anteriores entregas, aunque en Snake Eater también las habrá, y sencillamente geniales. Aunque como os hemos comentado en otras páginas, se echa en falta más 'chicha' argumental a mitad del juego, aun así, el guión está tremendamente elaborado. Pero como ha dicho Hideo Kojima recientemente, ha preferido reducir estos largos vídeos y que el jugador viera la historia por sí sola a través del juego. Todo esto se ve reflejado en la obra que han creado. La variedad está a la órden del día en Metal Gear Solid 3: Snake Eater y avanzar por los escenarios dará gusto. Ya no será sólo avanzar sin ser visto, también tendremos que ponernos un disfraz para pasar inadvertidos, huir de una cueva...en fin, variedad de situaciones que es mejor que veáis vosotros mismos para así disfrutarlas al máximo. No faltarán algunos enfrentamientos vibrantes con jefes finales, realzados por su espectacularidad y algunos por su impresionante duración. Aunque a la mayoría no será nada difícil derrotarlos, una lástima.

Una de las mayores novedades es la ausencia del radar solitón que tanto nos facilitaba la tarea. Gracias a él, sabíamos en todo momento la posición del enemigo y su campo de visión, pero ahora todo eso ha cambiado. Tendremos que, literalmente, buscarnos la vida para avanzar sin ser vistos por el terreno ruso, lo cual no siempre será una tarea fácil. La colocación de la cámara no siempre será todo lo buena que deseemos, pero aun así podremos colocarla prácticamente a nuestro gusto gracias al joystick analógico derecho o haciendo uso de la visión en primera persona. Pero aun así, hay que andar con ojo, porque el equipo de Konami ha sabido realmente hacer bien su trabajo, han sabido llevar la infiltración un paso más adelante y realmente hacen que nos pensemos dar un paso más y tener sudores cuando tenemos cerca a un soldado. Impresionante. Además, ahora al ser detectados, lo tendremos más difícil, ya que el estado de alerta, evasión y precaución han aumentado a 100 segundos cada uno, aunque por lo general duran algo más. Lo que sí es un detalle de agradecer es que al dar la alarma, no salgan enemigos de refuerzo sin parar, ya que en esta ocasión hay u límite, y si volvemos a dar la alarma en la misma pantalla, la radio dirá que ya no hay más refuerzos. Tampoco pasará que, si estamos en modo alerta y cambiamos de pantalla, se desactive dicho modo. En esta ocasión, nos perseguirán hasta que les consigamos dar esquinazo. Son detalles que, sin duda, hacen grande a un videojuego.