Análisis de Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged, o de cómo sigue siendo de divertido jugar a cochecitos

Seguro que podemos contarnos a montones los que en algún momento de nuestra infancia tuvimos en la mano algún que otro vehículo de la popular marca Hot Wheels. Recuerdo perfectamente mirar con atención aquella miniatura a escala y pensar, ¿por qué no?, que en algún momento de mi vida podría llegar a conducir uno igual que aquel pequeño vehículo de ensueño, pero a tamaño real. Seguro que algunos de aquellos niños del pasado, pudieron ver cumplido su sueño y verse convertidos quizás en grandes estrellas del motor o en grandes expertos en mecánica o automoción. Otros muchos –entre los que me incluyo- seguimos conformándonos con ver esos superdeportivos desde la distancia o exactamente igual que en nuestra infancia, en miniatura. Por suerte y desde hace unos cuantos años, los que además de ser admiradores de estas pequeñas recreaciones a escala del mundo de Hot Wheels somos aficionados a los videojuegos, tenemos las cosas un poquito más fáciles.

Entrando en el pequeño gran mundo de Hot Wheels

Videojuegos basados en la franquicia ha habido bastantes a lo largo del tiempo -imaginad que el primero de ellos hizo su aparición para Commodore 64 allá por 1984-. Desde aquí vamos a centrarnos en los dos más recientes y de una forma más concreta, siendo el protagonista de este análisis, en el último de ellos. Lanzado en 2021, Hot Wheels Unleashed sorprendió a propios y extraños para bien. Desarrollado por el estudio italiano MIlestone, con veinte años de experiencia en el sector, experta en el desarrollo de videojuegos basados en el mundo del motor, y responsables de los videojuegos oficiales de MotoGP, del mundial de SuperBikes o de la saga Ride; Hot Wheels Unleashed vino sin apenas hacer ruido a llenar ese hueco en los corazoncitos gamers de aquellos aficionados que, como decíamos anteriormente, crecieron arrastrando algún que otro cochecito por alguna que otra pared.

Esta experiencia nos ofrecía un frenético arcade de velocidad en donde cobraban vida y protagonismo todas aquellas miniaturas a escala. Llegados a este 2023, en Milestone han tenido a bien ofrecernos la segunda parte de aquel arcade de conducción. Un videojuego que, pese a contar con un 2 en su nombre, bien podría tratarse de una versión mejorada y ampliada de aquel primer videojuego que tanto nos sorprendió en 2021. Entramos en el mundo Hot Wheels, entramos en Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged.

"El videojuego bien podría tratarse de una versión mejorada de su antecesor, pero esconde más sorpresas de las que imaginamos. Esta vez tienen mucho que contarnos"

Pongámonos cómodos al volante, arrancamos

Para empezar a desgranar como se merece este Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged, lo primero de todo es fijarnos en como jugarlo. En sus modos de juego. Básicamente hay tres maneras de disfrutar del videojuego. Existe, tal y como llevaba incorporado el primero, un modo multijugador online. Podemos disfrutar del videojuego de manera local con un amigo a pantalla partida –permitidme apuntar que ambos modos de juego son ahora mucho más divertidos e interesantes por la integración de ciertas mecánicas jugables de las que hablaremos más adelante y que acercan más el título a lo que pudimos ver en videojuegos como Blur, Split/Second o Burnout-. O encontrándonos en el modo clásico de un jugador, podremos optar por iniciar una partida rápida en cualquiera de los modos del juego, que son: Carrera rápida, contrarreloj, derrapes y eliminación; o iniciar una partida en el nuevo modo Parada, que no es más que una carrera de puntos de control en la que lucharemos por establecer un tiempo récord en cada una de las pistas teniendo la posibilidad de comparar nuestro tiempo con el del resto de la comunidad. Donde encontramos verdaderamente una evolución notable con respecto a la primera parte en el modo para un jugador, es en su modo historia.

Entra en acción la narrativa en una nueva aventura basada en el mundo Hot Wheels

Lo primero que nos llama poderosamente la atención, y que es una de las grandes novedades con respecto a la primera parte, es la integración de una historia narrativa como modo principal del videojuego: un modo historia llamado Hot Wheels Creature Rampage. Nuestra misión, será dar caza a cinco criaturas gigantes a las que un científico loco ha dejado libres por accidente. La acción se desarrollará durante cinco áreas distintas, cada una con su jefe particular, en las que deberemos avanzar progresivamente terminando con éxito todas y cada una de las pruebas que componen esa área en concreto. Pruebas que consisten en salir victoriosos de una carrera simple, una contrarreloj, una prueba de derrape, una prueba eliminatoria, una carrera de puntos de control –llamada en el juego "Parada"- y las correspondientes luchas contra los jefes de área. Batallas que consisten en golpear tantos puntos de control como sean necesarios para derrotar al susodicho jefe antes de que termine el tiempo establecido entre dichos puntos de control. Todo un lujo de modo que nos permitirá mimetizarnos aún más con el videojuego, rememorando quizás alguna que otra batalla imaginaria pasada, que alguna vez soñamos en nuestra niñez.



Ahora que ya sabemos de qué manera podemos jugar con Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged, es momento de hablar de donde jugaremos. Y es que el videojuego incorpora de entrada cinco nuevos escenarios –hay un sexto, pero solo disponible en el modo Track Builder. Hablaremos de él más adelante-. Estos escenarios principales son: un minigolf, un museo de dinosaurios, un jardín trasero, una gasolinera y un salón de máquinas arcade. En estos cinco escenarios es en donde se concentrarán todas las pruebas a realizar. Cada uno de los escenarios, cuenta con diversas variaciones de su trazado a cada cual más curiosa que la siguiente. Algo que, a mi modo de verlo, puede llegar a dar la sensación de estar jugando siempre en el mismo trazado, siendo las ambientaciones de esos escenarios, bastante similares entre ellas.

Bien, tenemos el cómo y el dónde jugaremos, es hora de hablar de con qué. Es hora de hablar de los vehículos Hot Wheels.

"Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged consta de 130 vehículos de entre los que se encuentran, como novedad, motocicletas y vehículos todo terreno"

Entrar en el Garaje del juego es abrir aquella caja en la que guardábamos los cochecitos cuando éramos niños

En nuestro Garaje podremos contemplar la colección de modelos Hot Wheels que vayamos adquiriendo. Vehículos que van a ser completamente personalizables, ya sea con diseños que previamente hayamos creado con el editor, o con diseños creados por la comunidad. Estos vehículos de nuestra colección van a estar categorizados en tres variantes diferentes: coches de serie, potenciados o vehículos definitivos. La categoría en la que se encontrará cada uno de ellos, dependerá de cuanto hayamos aumentado su nivel utilizando para ello unos Kits de Mejora que conseguiremos tras superar de forma fructífera los objetivos de cada una de las carreras. En cada una de estas categorías, podremos desbloquear una serie de habilidades utilizando puntos de habilidad, que también conseguiremos como premio al cumplir objetivos. Estas habilidades podrán ser instaladas en nuestros vehículos de forma progresiva al subir de nivel hasta un máximo de seis. Estas habilidades instaladas, proveerán a nuestro Hot Wheels de mejoras en su Turbo Boost, en su derrape, en su embestida lateral o lo dotarán de inmunidad por colisión con ciertas trampas y obstáculos que encontraremos en el trazado del circuito.



Aumentemos aún más nuestra colección de Hot Wheels

En Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharger no dispondremos de la típica tienda tipo concesionario en donde iremos directamente a adquirir el vehículo que más nos interese. Dentro del Garaje encontraremos una particular “Tienda” para poder añadir más vehículos a nuestra colección y que casi funciona como lo hacían los quioscos de antaño. En ella tendremos la posibilidad de escoger entre seis modelos diferentes que se irán renovando cada 45 minutos. Dependiendo de la rareza del vehículo dependerá su precio final. Hay cuatro niveles diferentes de rareza: vehículos comunes, raros, legendarios y los más complicados de ver, los llamados “Super Treasure Hunt”. Cuanto más raro sea el vehículo en cuestión, más difícil será verlo disponible en la tienda. Casi casi igual que si se tratara del quiosco del barrio. Además, podemos ver el aspecto del coche dentro de su embalaje original, una maravilla.



Otra de las recompensas que podemos obtener realizando objetivos de área o de carrera es disponer de cupones de una tirada para la llamada “Hot Wheels Spin”. No es más que una ruleta de la suerte que encontraremos en el "Garaje", en donde podremos conseguir monedas, vehículos, puntos de habilidad o Kits de Mejora para nuestros Hot Wheels. No deja de tener su punto excitante no saber qué va a tocarte una vez hayas hecho girar la ruleta. Punto a favor.

Algo que repite Milestone con respecto a la primera parte del videojuego es el fantástico editor de diseños. No es para menos, ya que el primer Hot Wheels Unleashed dispone de más de un millón de diseños creados por la comunidad. En el caso de esta segunda parte, disponemos de un completísimo editor tanto del aspecto exterior e interior de nuestra miniatura a escala, como de adhesivos que incorporaremos posteriormente a esos vehículos. Aquí es donde podremos sacar nuestro lado más creativo, todo un acierto.



¿Qué no te gustan los trazados? Qué más da, créate uno a tu gusto

Otra de las particularidades creativas que Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharger ofrece a sus jugadores, es la posibilidad de crear sus propios circuitos. Estos trazados podrán ser integrados en cualquiera de sus cinco escenarios oficiales además de en un sexto escenario, completamente vacío, llamado "Track Room". Cada nuevo trazado que creemos podrá ser compartido con la comunidad de jugadores de Unleashed 2, así como añadir a nuestros trazados favoritos todos aquellas creaciones de la comunidad que nos llame la atención. No en vano, mas de medio millón de circuitos creados por la comunidad fueron compartidos en Hot Wheels Unleashed. ¡Casi nada!



Presumiblemente, al igual que pasa con su primera parte, Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharger incorporará la posibilidad de adquirir directamente desde el juego, complementos adicionales tanto para los dos editores, como para nuestra colección de vehículos. Unas adquisiciones que se harían directamente en la Store correspondiente de cada una de las plataformas.

"Es un detalle que un videojuego basado en una franquicia de juguetes no olvide ni pase por alto el valor creativo que tiene ese juguete convencional de base, y poner especial énfasis tanto en el editor de diseños como con el editor de circuitos"

¿Cómo es una partida de Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharger?

Hablemos ahora de las mecánicas jugables del videojuego, de cómo es una partida. Es fácil de explicar y de entender si has jugado a su primera parte porque es exactamente igual, pero con unas novedades bastante útiles. A las mecánicas ya existentes del Turbo Boost y el derrape en curvas, se añaden dos nuevas mecánicas: el salto, y la embestida o carga lateral. La capacidad de saltar nos dará la oportunidad de sortear obstáculos en el trazado o evitar molestas caídas al vacío mientras que la carga lateral, nos permitirá embestir a nuestros contrincantes con un sutil golpe de costado con el que podremos no solo desestabilizarlos si no que en el mejor de los casos podremos deshacernos de ellos tirándolos por un margen sin barrera en el trazado o permitirnos simplemente esquivar algún elemento en la pista.

Ambas mecánicas jugables, así como el turbo, están supeditadas a nuestra barra de Turbo Boost, permitiendo realizar en la medida de lo posible un salto doble o una doble carga lateral. Como en el primer Unleashed, rellenaremos nuestro turbo directamente en las zonas habilitadas para ello en pista, o realizando derrapes en curva. Tanto el salto como la carga lateral vienen a mejorar claramente nuestra experiencia en el multijugador tanto local como online (con juego cruzado entre plataformas a excepción de Nintendo Switch). Porque como en casos como en los anteriormente mencionados Blur o incluso Mario Kart, aquí no solo bastará con ir más rápido que el rival, sino que ahora está en nuestra mano ponérselo más difícil. Quién sabe si en la tercera parte de Hot Wheels Unleashed tendremos la posibilidad de utilizar "Power Ups" contra nuestros contrincantes. Es algo que no estaría nada mal, veremos. Poco a poco.



Mejoras gráficas notables con respecto al primer Hot Wheels Unleashed utilizando tecnología gráfica de AMD

Contemplar el diseño de cada una de las representaciones modeladas en 3D de cada una de las miniaturas es un espectáculo. Se diferencian a la perfección los materiales, los diseños, los acabados y las formas de cada uno de los vehículos, así como la forma en que la luz se refleja en ellos. Gráficamente el juego luce genial en general. Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharged utiliza la tecnología AMD Fidelity Fx Super Resolution 1.0 de escalado de imágenes, ofreciendo una calidad gráfica asombrosa a una tasa de FPS elevada. Todo un acierto teniendo en cuenta la velocidad a la que van nuestros cochecitos por el trazado. Para la realización del análisis se ha utilizado la versión de PlayStation 5, cuyo rendimiento ha sido excelente. Cero problemas gráficos.

Conclusiones

El título es en sí una maravilla. Si ya lo fue en su día el primer Unleashed esta segunda parte mejora notablemente al original y se pone unos peldaños por encima. Tanto la jugabilidad, completamente loca y acelerada por momentos al estilo de videojuegos tan míticos como WipeOut o Burnout, como en su variante más creativa, con el editor de diseños y de circuitos, Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharger va a ofrecer horas y horas de diversión tanto a los más pequeños de la casa como a aquellos grandotes que aún sueñan con lo felices que fueron en su niñez, cuando improvisaban un circuito para sus Hot Wheels con tres cajas de zapatos, dos latas de refresco y un saco lleno de imaginación. Lo peor que se le puede reprochar al videojuego es que sea demasiado continuista. Es cierto que algunos modelos de vehículos se repiten de los que ya pudimos disfrutar en el primer Unleashed, y que, tras una larga sesión de juego, puede tornarse repetitivo después de pasar una y otra vez por los, quizás escasos, cinco escenarios de los que dispone el videojuego, pero en cualquier caso estas no deben ser unas razones de peso para no disfrutar de todo lo que Hot Wheels Unleashed 2: Turbocharger nos ofrece, que no es poca cosa.