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Ciudad en celo - Análisis de Grand Theft Auto V
Grand Theft Auto V regresa por segunda vez con todas las bondades de la novena generación de consolas. Nunca cansa.
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En septiembre de 2013 tuvo lugar un estreno muy esperado y sonado en el mundo de los videojuegos: Grand Theft Auto V. Tras años de rumores e información cuentagotas y material promocional todos los usuarios de PC, Xbox 360 y PlayStation 3 conocieron a Trevor, Michael y Franklin en una historia de mafias, pandillas callejeras y atracos a lo grande ambientada en la actualidad, con su crisis económica y la superficialidad de las redes sociales. Si en Vice City vivimos el horterismo desfasado de los años 80 y en San Andreas el pesimismo de final de siglo de los 90, en Grand Theft Auto IV y Grand Theft Auto V contemplamos la América de los 2000 y 2010 respectivamente.
Esta entrega vivió el auge de la retrocompatibilidad y de la remasterizacion a gran escala, lo que le permitió adaptarse a tres generaciones distintas. Es más, aprovechó la evolución técnica y tecnológica de cada época y gracias a su mundo abierto online ha estado entre los juegos más vendidos y más populares desde entonces. Un éxito comercial que nos hace preguntar si aún existe gente que aún no ha comprado el juego en alguna parte del mundo. De esta manera, en 2013 fue analizado por Rodrigo Aliende, cuando dio el salto a Xbox One y PlayStation 4 en noviembre de 2014 fue estudiado por Juan Emilio Palomino, en 2015 debutó en PC (una tarea pendiente de la compañía) y Alberto Hernanz habló de ello y, ahora en 2022, es mi turno de valorar su versión de Xbox Series y PlayStation 5.

Tres cabezas locas contra la sociedad
Grand Theft Auto V es el primer título de la saga con un protagonismo coral, sin contar la primera entrega original, que tenía varios personajes elegibles pero sin nula relevancia argumental. Hablamos de Franklin Clinton un joven afroamericano que quiere ganarse la vida legalmente y tranquila pero cuyo amigo Lamal no para de meterle en problemas; Michael De Santa, un hombre maduro que aparentemente ha triunfado en la vida gracias al crimen organizado pero que aún así es infeliz, y Trevor Philips, un perturbado excluido de la sociedad y al margen de la ley. Por carambolas del destino se conocerán y trabajarán juntos en decenas de misiones y trabajos sucios, formando un trío criminal a medio camino entre la amistad y el odio. Quizá resumido así se antoje como la misma historia de Grand Theft Auto que se repite en cada entrega, pero una vez más lo importante son los personajes, realmente carismáticos y únicos, la locura de los sucesos y la representación social de esta parodia cosmopolita de grandes dimensiones.
Nada más iniciar el juego debemos elegir entre el modo “Individual” y el “GTA Online”, pero de momento nos centraremos en el primero, que para eso es la historia principal. De entrada el tutorial-prólogo es movidito, pues encarnamos a Trevor durante el atraco de hace nueve años que le cambió la vida. En un principio un banco de una ciudad pequeña no se antojaba un gran desafío para una banda profesional de ladrones, pero todo se complicó con la policía y murieron algunos integrantes. Se agradece estos tutoriales completos, bien integrados y divertidos. Conceptos como las coberturas o el cambio de personajes serán esenciales más adelante, incluso tenemos una persecución en furgoneta. Ya en la actualidad, en una cinemática conocemos a Michael durante una sesión con su terapeuta para acto seguido realizar la primera misión real con Franklin y su problemático amigo Lamar. La perspectiva de la historia cambiará a menudo entre un personaje u otro. Tras esto nos hacemos una idea de la personalidad de los protagonistas e incluso, a pesar de su vida delincuente, les apreciaremos como seres humanos. Tener un antihéroe (o villano) interesante y carismático es importante y un requisito real en esta franquicia desde que en Grand Theft Auto: Vice City se preocupasen por ello. ¿Acaso a alguien le cae bien Claude Speed y sus predecesores?
Los Santos, ciudad de luces y sombras
El cuarto protagonista es la ciudad de Los Santos, un ente arquitectónico, social y mundano que goza de vida propia. No de manera literal, claro, pero por poco no es considerado un ser vivo. En esta enorme ciudad, inspirada en Los Angeles. Esta gran urbe abarca centenares de negocios, zonas de ocio, parques, exteriores silvestres, carreteras y barrios residenciales, así como zonas de alta clase y otras más bajas. En esta ciudad encontraremos todo tipo de negocios, desde tiendas de ropa y de armas, concesionarios de coches, gimnasios, clubs de monólogos o de espectáculos para adultos hasta tradicionales salas de cine, donde es posible ver pedante cine de autor (por suerte son películas inventadas y no está High Life, de Claire Dennis). No nos olvidemos de los civiles, de toda clase y condición, sexo y raza, idioma y acento, adultos y ancianos, pero una vez más nunca niños, pero sí animales callejeros. Los perros y gatos pueden ser nuestros amigos, enemigos o víctimas, como cualquier hijo del vecino. Las posibilidades de la ciudad viviente se aprecian aún más en el modo online, como ya veremos más adelante.
Quien haya jugado las anteriores versiones de Grand Theft Auto V, o cualquier entrega de la saga, es consciente de que el núcleo argumental y jugable (la misión divina, si se prefiere) es la ansía de dinero y respeto. Para ello cumpliremos numerosas misiones de todo tipo y ofrecidas por cualquier personaje imaginable, desde comerciantes chanchulleros, amigos, familiares. Normalmente se accede a estas misiones mediante personajes concretos ubicados en el mapa pero otras importante comienzan de manera automática cuando entramos o salimos de nuestra casa, lo que otorga cierto realismo pero también un inconveniente si pensábamos cerrar partida. ¡Cosas que pasan, cosas de casa! También conoceremos individuos extravagantes esparcidos por el mapa, sin relevancia para la trama, que suelen ofrecer misiones bastante divertidas. Nuestros favoritos son el paparazzi que nos involucra en sus trabajos fotográficos inmorales o el activista por la legalización de la marihuana y sus extraterrestres alucinógenos.

Amigos, jefes y vagabundos que nos mandan tareas
¿Qué podemos decir sobre las misiones? Son variadas, tremendas, dinámicas e imprevisibles. Es verdad que casi todas se resuelven mediante tiroteos y persecuciones automovilísticas, pero lo importante es el contexto, los motivos que nos han llevado a esa situación. Desde emboscadas entre bandas rivales hasta el rescate de un hijo secuestrado en un yate robado. Se disfruta aún más cuando participan más de un aliado (sea del trío protagonista o un secundario recurrente) o incluso Chop, el rotweiller ladrón de corazones al que educaremos y mimaremos. Estas situaciones se disfrutan sobre todo porque los protagonistas son carismáticos, humanos y están bien escritos, se sienten individuos únicos, por eso nos importan su vida y su destino.
Un abuelo cebolleta se quejaría de que las misiones de ahora son más fáciles, que tienen puntos de control, que no es necesario buscar al personaje una y otra vez para comenzar de nuevo y que incluso se pueden repetir una vez completadas para conseguir una mejor puntuación, sin embargo yo lanzo alabanzas a los programadores. ¡Atrás quedaron las pesadillas de las carreras en lancha contra los cubanos, perseguir un maldito tren o conducir un autobús repleto de presos! Porque aunque muramos muchas veces y repitamos la misma sección más de una vez nada se asemeja al dolor del sistema antiguo.
Bullicioso mundo abierto en línea
El modo online, a diferencia de la campaña principal, nunca ha dejado de expandirse desde su estreno original en 2013. Si bien este magno mundo abierto era una evolución del multijugador de Grand Theft Auto IV rápidamente adquirió su propia identidad e importancia. Tanta importancia que eclipsó la historia principal y estancó la saga numérica. No es ningún secreto que si no se ha lanzado más juegos de la saga en casi diez años es porque Rockstar y los fans están embelesados por este mundo abierto en línea. Tampoco vamos a enfadarnos con ellos, pues la campaña principal de GTA V sigue ahí y las anteriores entregas de la franquicia también, todas disponibles para disfrutarlas en cualquier momento... aunque aún nos acordamos del chiquilicuátrico remaster-recopilatorio de 2021, analizado por Sergi Bosch. Por suerte casi todos los bugs se han solucionado ya.
Es complicado abarcar todo el mundo de GTA Online porque es inmenso, siempre está despierto y cuenta con numerosos modos jugables, así que hablaremos un poco de mi experiencia personal. Lo primero que hice fue crearme un personaje, una estilosa mujer llamada Miss Nerea, equiparse con vehículos y armas, y elegir una rama empresarial desde dónde buscar fortuna. Existe el club de moteros, el tráfico de armas y el mundo de los negocios, pero elegimos el mundo nocturno. Poseer y gestionar una discoteca se antojaba apetecible y poco peligroso, así que nada más salir de prisión, tras cumplir condena, nos llama Lamar (metido siempre en todos los fregados posibles) para explicarnos que hemos conseguido un local.
Una vez en el lugar conocemos a algunos individuos del negocio, algunos debutantes y otros ya conocidos como el arrollador Gay Tony, unos originarios de otros juegos y otros nuevos, y recibimos una oleada de información y normas sobre gestión de negocios. Para sorpresa de nadie, nuestra discoteca se lucra tanto de las consumiciones como del trapicheo de droga a mediana, pero esto sólo es una parte del asunto. Como si fuera un título de simulación empresarial, debemos gestionar los precios, la decoración y la contratación del personal como seguratas, camareros y DJs. Por supuesto que cumpliremos misiones relacionadas con nuestro negocio, de hecho las primeras están relacionadas con nuestros nuevos empleados.

¿No te apetece gestionar el negocio en este momento y prefieres algo cafre? Para tal menester está el modo Libre, donde recorremos Los Santos a nuestro antojo, visitando nuestras propiedades inmobiliarias (pisos, aparcamientos, locales) y buscando nuevos retos cooperativos, competitivos y carreras con otros jugadores. Lo que hay que tener claro es que aquí no todos son amigos y muchos no dudarán en matarnos para echarse unas risas. Con suerte podemos formar una cuadrilla de aliados (o Crew) y ser el terror del barrio. Es una sensación parecida cuando paseaba con los colegas en el mundo online de Red Dead Redemption. Si deseamos ganar dinero, prestigio y experiencia para subir de nivel lo mejor son los distintos tipos de partida, en los cuales nos toparemos con otros usuarios, algunos muy veteranos y otros tan novatos como nosotros. No suelen ser tareas fáciles pero sí divertidas, como por ejemplo la tarea en la que nuestro equipo debe recoger unos muñecos repletos de droga y darse a la fuga, o encontrar una furgoneta con droga dentro y llevarlo al taller de Hao para que nos pague. Sin olvidarnos que en todo momento nos acosan los enemigos, sea a pata o en coche, y que las vidas son limitadas y compartidas.
¡Toda esa gente fea que se cree hermosa!
¡Una nueva generación, una nueva consola, una nueva ciudad! El mayor aliciente de una remasterización es el lavado de cara y las bondades jugables, y Rockstar Games se lo toma en serio. Por fin en consolas gozaremos de los ansiados 60 fps y de la resolución 4K, que junto a la deleitosa reducción de cargas convierte este juego de 2013 en una obra de nueva generación. ¡Poca broma con esto! Hablamos de un juego de casi diez años que se siente, se contempla y se juega como un título actual. Es inevitable pasear fascinado por esta gran ciudad de Los Santos, tan colosal como hermosa, tan fascinante como peligrosa, observando a los peatones y el ciclo de día y noche. El Rockstar Advanced Game Engine (RAGE), motor gráfico creado de la compañía, siempre ha mostrado buen músculo a la hora de representar escenarios de gran tamaño y habitado por centenares de peatones y vehículos, todos en movimiento y todos con vida propia. Por no mencionar la meticulosidad de los gestos, los movimientos corporales, las físicas y el propio control. Quizá sintamos en ocasiones que nuestro personaje se mueva lento o pesado pero es lo que haría un humano en la vida real, en cambio eso se olvida cuando estamos en medio de un tiroteo o de una persecución. Ahí sí nos sentiremos matones y maquinotes de matar.
La variada banda sonora nos sumerge en una fusión cultural gracias a unas emisoras de radio que van desde el hip hop hasta el rock, desde la salsa hasta el pop, sin olvidar a sus charlatanes locutores. El doblaje siempre es un aspecto muy cuidado en Rockstar, tanto es así que sería imposible ser doblado en otros idiomas. La variedad de personas y sus acentos es apabullante, desde pijos playeros hasta pandilleros negros, desde ancianos blancos jubilados hasta empresarias asiáticas, turistas e inmigrantes de todo el globo terráqueo, por no olvidar a los borrachos, drogadictos y vagabundos. Ser un actor de doblaje en Grand Theft Auto V es un asunto serio, sino miremos al rapero Gerald "Slink" Johnson, quién triunfó gracias a su papel como Lamar Davis, el mejor amigo de Franklin (voz de Shawn Fonteno). Completando la cuadrilla están el canadiense Steve Ogg como Trevor y Ned Luke como Michael.
Conclusión
¿Qué podemos decir de Grand Theft Auto V que no se haya dicho ya? Si eres de esas personas que aún no lo han jugado a pesar de estar en activo desde 2013 éste es el momento ideal. Se aprovecha al máximo la potencia de la novena generación de consolas creando un producto increíblemente actual y renovado en cuanto a su imagen y extremadamente cómodo de jugar. La campaña principal está nutrida de muchísimas misiones, secretos y eventos aleatorios, por lo que tenemos horas de diversión chunga. Del modo GTA Online ya ni podemos contabilizar el número de horas al que dedicaremos, sobre todo cuando no cesa de actualizarse cada semana. Luego tenemos el "Modo Cine" que nos permite encarnar a cualquier personaje desbloqueado y grabar sus aventuras o tomar fotos impactantes. O simplemente reunimos a nuestros tres macarras protagonistas y, alternando su uso, causamos una catástrofe en el centro del pueblo sin motivo alguno, sólo por las risas. ¡Todo es posible si has nacido en América!
Esta entrega vivió el auge de la retrocompatibilidad y de la remasterizacion a gran escala, lo que le permitió adaptarse a tres generaciones distintas. Es más, aprovechó la evolución técnica y tecnológica de cada época y gracias a su mundo abierto online ha estado entre los juegos más vendidos y más populares desde entonces. Un éxito comercial que nos hace preguntar si aún existe gente que aún no ha comprado el juego en alguna parte del mundo. De esta manera, en 2013 fue analizado por Rodrigo Aliende, cuando dio el salto a Xbox One y PlayStation 4 en noviembre de 2014 fue estudiado por Juan Emilio Palomino, en 2015 debutó en PC (una tarea pendiente de la compañía) y Alberto Hernanz habló de ello y, ahora en 2022, es mi turno de valorar su versión de Xbox Series y PlayStation 5.


Tres cabezas locas contra la sociedad
Grand Theft Auto V es el primer título de la saga con un protagonismo coral, sin contar la primera entrega original, que tenía varios personajes elegibles pero sin nula relevancia argumental. Hablamos de Franklin Clinton un joven afroamericano que quiere ganarse la vida legalmente y tranquila pero cuyo amigo Lamal no para de meterle en problemas; Michael De Santa, un hombre maduro que aparentemente ha triunfado en la vida gracias al crimen organizado pero que aún así es infeliz, y Trevor Philips, un perturbado excluido de la sociedad y al margen de la ley. Por carambolas del destino se conocerán y trabajarán juntos en decenas de misiones y trabajos sucios, formando un trío criminal a medio camino entre la amistad y el odio. Quizá resumido así se antoje como la misma historia de Grand Theft Auto que se repite en cada entrega, pero una vez más lo importante son los personajes, realmente carismáticos y únicos, la locura de los sucesos y la representación social de esta parodia cosmopolita de grandes dimensiones.
Nada más iniciar el juego debemos elegir entre el modo “Individual” y el “GTA Online”, pero de momento nos centraremos en el primero, que para eso es la historia principal. De entrada el tutorial-prólogo es movidito, pues encarnamos a Trevor durante el atraco de hace nueve años que le cambió la vida. En un principio un banco de una ciudad pequeña no se antojaba un gran desafío para una banda profesional de ladrones, pero todo se complicó con la policía y murieron algunos integrantes. Se agradece estos tutoriales completos, bien integrados y divertidos. Conceptos como las coberturas o el cambio de personajes serán esenciales más adelante, incluso tenemos una persecución en furgoneta. Ya en la actualidad, en una cinemática conocemos a Michael durante una sesión con su terapeuta para acto seguido realizar la primera misión real con Franklin y su problemático amigo Lamar. La perspectiva de la historia cambiará a menudo entre un personaje u otro. Tras esto nos hacemos una idea de la personalidad de los protagonistas e incluso, a pesar de su vida delincuente, les apreciaremos como seres humanos. Tener un antihéroe (o villano) interesante y carismático es importante y un requisito real en esta franquicia desde que en Grand Theft Auto: Vice City se preocupasen por ello. ¿Acaso a alguien le cae bien Claude Speed y sus predecesores?
"Los tres caóticos protagonistas son carismáticos y seres muy vivos"
Los Santos, ciudad de luces y sombras
El cuarto protagonista es la ciudad de Los Santos, un ente arquitectónico, social y mundano que goza de vida propia. No de manera literal, claro, pero por poco no es considerado un ser vivo. En esta enorme ciudad, inspirada en Los Angeles. Esta gran urbe abarca centenares de negocios, zonas de ocio, parques, exteriores silvestres, carreteras y barrios residenciales, así como zonas de alta clase y otras más bajas. En esta ciudad encontraremos todo tipo de negocios, desde tiendas de ropa y de armas, concesionarios de coches, gimnasios, clubs de monólogos o de espectáculos para adultos hasta tradicionales salas de cine, donde es posible ver pedante cine de autor (por suerte son películas inventadas y no está High Life, de Claire Dennis). No nos olvidemos de los civiles, de toda clase y condición, sexo y raza, idioma y acento, adultos y ancianos, pero una vez más nunca niños, pero sí animales callejeros. Los perros y gatos pueden ser nuestros amigos, enemigos o víctimas, como cualquier hijo del vecino. Las posibilidades de la ciudad viviente se aprecian aún más en el modo online, como ya veremos más adelante.
Quien haya jugado las anteriores versiones de Grand Theft Auto V, o cualquier entrega de la saga, es consciente de que el núcleo argumental y jugable (la misión divina, si se prefiere) es la ansía de dinero y respeto. Para ello cumpliremos numerosas misiones de todo tipo y ofrecidas por cualquier personaje imaginable, desde comerciantes chanchulleros, amigos, familiares. Normalmente se accede a estas misiones mediante personajes concretos ubicados en el mapa pero otras importante comienzan de manera automática cuando entramos o salimos de nuestra casa, lo que otorga cierto realismo pero también un inconveniente si pensábamos cerrar partida. ¡Cosas que pasan, cosas de casa! También conoceremos individuos extravagantes esparcidos por el mapa, sin relevancia para la trama, que suelen ofrecer misiones bastante divertidas. Nuestros favoritos son el paparazzi que nos involucra en sus trabajos fotográficos inmorales o el activista por la legalización de la marihuana y sus extraterrestres alucinógenos.


Amigos, jefes y vagabundos que nos mandan tareas
¿Qué podemos decir sobre las misiones? Son variadas, tremendas, dinámicas e imprevisibles. Es verdad que casi todas se resuelven mediante tiroteos y persecuciones automovilísticas, pero lo importante es el contexto, los motivos que nos han llevado a esa situación. Desde emboscadas entre bandas rivales hasta el rescate de un hijo secuestrado en un yate robado. Se disfruta aún más cuando participan más de un aliado (sea del trío protagonista o un secundario recurrente) o incluso Chop, el rotweiller ladrón de corazones al que educaremos y mimaremos. Estas situaciones se disfrutan sobre todo porque los protagonistas son carismáticos, humanos y están bien escritos, se sienten individuos únicos, por eso nos importan su vida y su destino.
Un abuelo cebolleta se quejaría de que las misiones de ahora son más fáciles, que tienen puntos de control, que no es necesario buscar al personaje una y otra vez para comenzar de nuevo y que incluso se pueden repetir una vez completadas para conseguir una mejor puntuación, sin embargo yo lanzo alabanzas a los programadores. ¡Atrás quedaron las pesadillas de las carreras en lancha contra los cubanos, perseguir un maldito tren o conducir un autobús repleto de presos! Porque aunque muramos muchas veces y repitamos la misma sección más de una vez nada se asemeja al dolor del sistema antiguo.
"El juego es desafiante pero su sistema de misiones ya no es injusto y es más accesible"
Bullicioso mundo abierto en línea
El modo online, a diferencia de la campaña principal, nunca ha dejado de expandirse desde su estreno original en 2013. Si bien este magno mundo abierto era una evolución del multijugador de Grand Theft Auto IV rápidamente adquirió su propia identidad e importancia. Tanta importancia que eclipsó la historia principal y estancó la saga numérica. No es ningún secreto que si no se ha lanzado más juegos de la saga en casi diez años es porque Rockstar y los fans están embelesados por este mundo abierto en línea. Tampoco vamos a enfadarnos con ellos, pues la campaña principal de GTA V sigue ahí y las anteriores entregas de la franquicia también, todas disponibles para disfrutarlas en cualquier momento... aunque aún nos acordamos del chiquilicuátrico remaster-recopilatorio de 2021, analizado por Sergi Bosch. Por suerte casi todos los bugs se han solucionado ya.
Es complicado abarcar todo el mundo de GTA Online porque es inmenso, siempre está despierto y cuenta con numerosos modos jugables, así que hablaremos un poco de mi experiencia personal. Lo primero que hice fue crearme un personaje, una estilosa mujer llamada Miss Nerea, equiparse con vehículos y armas, y elegir una rama empresarial desde dónde buscar fortuna. Existe el club de moteros, el tráfico de armas y el mundo de los negocios, pero elegimos el mundo nocturno. Poseer y gestionar una discoteca se antojaba apetecible y poco peligroso, así que nada más salir de prisión, tras cumplir condena, nos llama Lamar (metido siempre en todos los fregados posibles) para explicarnos que hemos conseguido un local.
Una vez en el lugar conocemos a algunos individuos del negocio, algunos debutantes y otros ya conocidos como el arrollador Gay Tony, unos originarios de otros juegos y otros nuevos, y recibimos una oleada de información y normas sobre gestión de negocios. Para sorpresa de nadie, nuestra discoteca se lucra tanto de las consumiciones como del trapicheo de droga a mediana, pero esto sólo es una parte del asunto. Como si fuera un título de simulación empresarial, debemos gestionar los precios, la decoración y la contratación del personal como seguratas, camareros y DJs. Por supuesto que cumpliremos misiones relacionadas con nuestro negocio, de hecho las primeras están relacionadas con nuestros nuevos empleados.


¿No te apetece gestionar el negocio en este momento y prefieres algo cafre? Para tal menester está el modo Libre, donde recorremos Los Santos a nuestro antojo, visitando nuestras propiedades inmobiliarias (pisos, aparcamientos, locales) y buscando nuevos retos cooperativos, competitivos y carreras con otros jugadores. Lo que hay que tener claro es que aquí no todos son amigos y muchos no dudarán en matarnos para echarse unas risas. Con suerte podemos formar una cuadrilla de aliados (o Crew) y ser el terror del barrio. Es una sensación parecida cuando paseaba con los colegas en el mundo online de Red Dead Redemption. Si deseamos ganar dinero, prestigio y experiencia para subir de nivel lo mejor son los distintos tipos de partida, en los cuales nos toparemos con otros usuarios, algunos muy veteranos y otros tan novatos como nosotros. No suelen ser tareas fáciles pero sí divertidas, como por ejemplo la tarea en la que nuestro equipo debe recoger unos muñecos repletos de droga y darse a la fuga, o encontrar una furgoneta con droga dentro y llevarlo al taller de Hao para que nos pague. Sin olvidarnos que en todo momento nos acosan los enemigos, sea a pata o en coche, y que las vidas son limitadas y compartidas.
¡Toda esa gente fea que se cree hermosa!
¡Una nueva generación, una nueva consola, una nueva ciudad! El mayor aliciente de una remasterización es el lavado de cara y las bondades jugables, y Rockstar Games se lo toma en serio. Por fin en consolas gozaremos de los ansiados 60 fps y de la resolución 4K, que junto a la deleitosa reducción de cargas convierte este juego de 2013 en una obra de nueva generación. ¡Poca broma con esto! Hablamos de un juego de casi diez años que se siente, se contempla y se juega como un título actual. Es inevitable pasear fascinado por esta gran ciudad de Los Santos, tan colosal como hermosa, tan fascinante como peligrosa, observando a los peatones y el ciclo de día y noche. El Rockstar Advanced Game Engine (RAGE), motor gráfico creado de la compañía, siempre ha mostrado buen músculo a la hora de representar escenarios de gran tamaño y habitado por centenares de peatones y vehículos, todos en movimiento y todos con vida propia. Por no mencionar la meticulosidad de los gestos, los movimientos corporales, las físicas y el propio control. Quizá sintamos en ocasiones que nuestro personaje se mueva lento o pesado pero es lo que haría un humano en la vida real, en cambio eso se olvida cuando estamos en medio de un tiroteo o de una persecución. Ahí sí nos sentiremos matones y maquinotes de matar.
"En el mundo abierto de GTA seremos un empresario de éxito... con sus asuntos turbios"
La variada banda sonora nos sumerge en una fusión cultural gracias a unas emisoras de radio que van desde el hip hop hasta el rock, desde la salsa hasta el pop, sin olvidar a sus charlatanes locutores. El doblaje siempre es un aspecto muy cuidado en Rockstar, tanto es así que sería imposible ser doblado en otros idiomas. La variedad de personas y sus acentos es apabullante, desde pijos playeros hasta pandilleros negros, desde ancianos blancos jubilados hasta empresarias asiáticas, turistas e inmigrantes de todo el globo terráqueo, por no olvidar a los borrachos, drogadictos y vagabundos. Ser un actor de doblaje en Grand Theft Auto V es un asunto serio, sino miremos al rapero Gerald "Slink" Johnson, quién triunfó gracias a su papel como Lamar Davis, el mejor amigo de Franklin (voz de Shawn Fonteno). Completando la cuadrilla están el canadiense Steve Ogg como Trevor y Ned Luke como Michael.
Conclusión
¿Qué podemos decir de Grand Theft Auto V que no se haya dicho ya? Si eres de esas personas que aún no lo han jugado a pesar de estar en activo desde 2013 éste es el momento ideal. Se aprovecha al máximo la potencia de la novena generación de consolas creando un producto increíblemente actual y renovado en cuanto a su imagen y extremadamente cómodo de jugar. La campaña principal está nutrida de muchísimas misiones, secretos y eventos aleatorios, por lo que tenemos horas de diversión chunga. Del modo GTA Online ya ni podemos contabilizar el número de horas al que dedicaremos, sobre todo cuando no cesa de actualizarse cada semana. Luego tenemos el "Modo Cine" que nos permite encarnar a cualquier personaje desbloqueado y grabar sus aventuras o tomar fotos impactantes. O simplemente reunimos a nuestros tres macarras protagonistas y, alternando su uso, causamos una catástrofe en el centro del pueblo sin motivo alguno, sólo por las risas. ¡Todo es posible si has nacido en América!
Alternativas
El próximo Saints Row, otra saga veterana que regresa a la actualidad.
Los 60 fps, gráficos a 4K y menores tiempos de carga. Junto a todo lo bueno ya existente.
No siempre es agradable pagar un suplemento por una actualización.
Un juego de 2013 que sigue impresionando y divirtiendo gracias a las actualizaciones y el buen hacer del equipo.