
Saturn
Lagarto Catódico
Pequeño clásico del género de plataformas, con un carismático protagonista y una mecánica de juego poco vista.
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Introducción
Los juegos de plataformas suelen estar protagonizados por animales, normalmente antropomórficos, dado que su objetivo es alegrar a la vista (siendo infantil la mayoría) y crear un mundo de fantasía e irrealidad (lo que explicaría que estos juegos suelen ser tan poco verosímiles). La mayoría de los protagonistas plataformeros suelen ser mamíferos: erizos, perros, gatos, bandicoots, tigres, murciélagos; pero existen excepciones, por suerte, como los reptiles: "Croc", "Spyro the Dragon" o "Gex", sobre el cual trata este análisis.
GEX inició una pequeña saga de videojuegos que si bien fue conocida y jugada no por ello alcanzó un éxito arrollador como la de otros personajes, siendo los títulos "Gex", "Gex: Enter the gecko" y "Gex: Deep cover gecko" los más representativos de ésta. Su trayectoria empezó con la Sega Saturn, una consola que como todos saben fracasó, y al igual que muchos juegos famosos (Resident Evil, Tomb Raider) tuvo que adaptarse a la plataforma en voga: PlayStation.
El Gecko
Ante todo se debe presentar al personaje: Gex el gecko es un teleadicto que conoce toda la programación y todos los géneros televisivos, por lo que ya se cansa de los tópicos del medio y busca nuevos contenidos. Es un personaje sarcástico, bromista, pocas veces está sin abrir la boca, pues siempre está contando algún chiste, comentario irónico, burla hacia sus enemigos, imitación de un personaje de la televisión o del cine, o simplemente actuaciones burdas y exageradas.
A pesar de estar sentado en el sofá gran parte de su vida de lagarto no renuncia a tener un estilo chulesco con un sentido refinado de la estética (al principio no mucho, pero con la edad lo va puliendo) y, aunque parezca absurdo (aun más tratándose de un juego de plataformas), Gex va mejorando su modo de vida. En este juego sólo es un adicto que se pasa las tardes muertas delante del televisor, que aparte de los personajes de la caja tonta sólo conoce a su familia (se ve un cuadro de ellos en el pasillo de su casa), y que es un don nadie. Sin embargo, en la segunda parte es contratado por una agencia secreta para una misión y se hace rico, y en la tercera es un detective multimillonario con novia incluida. No es muy trascendental ni profundo, esto no es un RPG, pero es cuanto menos curioso.
Argumento: Mass Media
Gex se encontraba, como siempre, delante de la pantalla del televisor, sin preocuparse por la salud de sus ojos ni de su dieta, cambiando de canal en canal, deseoso de ver alguna serie de culto nueva o un concurso de variedades diferente. En una de esas búsquedas frustantes oye un zumbido de mosca que revoletea alrededor de su cabeza, por lo que, sin mirar ni pestañear, alarga su kilométrica lengua succionadora y la engulle. A continuación eructa.
Lo que parecía un dulce tentempié hasta la hora de cenar resultó ser un trasmisor, una trampa propiedad de Rez, cibérnetico ser que habita entre las ondas electromagnéticas de la red mundial de televisión, diseñada para localizar y capturar a quien lo trague; poderoso en su medio, con el cebo en el objetivo, alarga su avariciosa mano a través del televisor de Gex y captura a su dueño (y al sofá, pero esto no lo necesitaba).
¿Su objetivo?, convertir al dicharachero lagarto en la mascota oficial de su nueva cadena de televisión, ya que llevaba mucho tiempo observándole puesto que no conocía a ningun otro espectador que permaneciera tantas horas enfrente de la pantalla. No estaría mal para él este honor sino fuera porque bañar en oro a la mascota para que reluzca más y resulte más atractiva es un serio inconveniente para seguir viviendo.
Los juegos de plataformas suelen estar protagonizados por animales, normalmente antropomórficos, dado que su objetivo es alegrar a la vista (siendo infantil la mayoría) y crear un mundo de fantasía e irrealidad (lo que explicaría que estos juegos suelen ser tan poco verosímiles). La mayoría de los protagonistas plataformeros suelen ser mamíferos: erizos, perros, gatos, bandicoots, tigres, murciélagos; pero existen excepciones, por suerte, como los reptiles: "Croc", "Spyro the Dragon" o "Gex", sobre el cual trata este análisis.
GEX inició una pequeña saga de videojuegos que si bien fue conocida y jugada no por ello alcanzó un éxito arrollador como la de otros personajes, siendo los títulos "Gex", "Gex: Enter the gecko" y "Gex: Deep cover gecko" los más representativos de ésta. Su trayectoria empezó con la Sega Saturn, una consola que como todos saben fracasó, y al igual que muchos juegos famosos (Resident Evil, Tomb Raider) tuvo que adaptarse a la plataforma en voga: PlayStation.
El Gecko
Ante todo se debe presentar al personaje: Gex el gecko es un teleadicto que conoce toda la programación y todos los géneros televisivos, por lo que ya se cansa de los tópicos del medio y busca nuevos contenidos. Es un personaje sarcástico, bromista, pocas veces está sin abrir la boca, pues siempre está contando algún chiste, comentario irónico, burla hacia sus enemigos, imitación de un personaje de la televisión o del cine, o simplemente actuaciones burdas y exageradas.
A pesar de estar sentado en el sofá gran parte de su vida de lagarto no renuncia a tener un estilo chulesco con un sentido refinado de la estética (al principio no mucho, pero con la edad lo va puliendo) y, aunque parezca absurdo (aun más tratándose de un juego de plataformas), Gex va mejorando su modo de vida. En este juego sólo es un adicto que se pasa las tardes muertas delante del televisor, que aparte de los personajes de la caja tonta sólo conoce a su familia (se ve un cuadro de ellos en el pasillo de su casa), y que es un don nadie. Sin embargo, en la segunda parte es contratado por una agencia secreta para una misión y se hace rico, y en la tercera es un detective multimillonario con novia incluida. No es muy trascendental ni profundo, esto no es un RPG, pero es cuanto menos curioso.
Argumento: Mass Media
Gex se encontraba, como siempre, delante de la pantalla del televisor, sin preocuparse por la salud de sus ojos ni de su dieta, cambiando de canal en canal, deseoso de ver alguna serie de culto nueva o un concurso de variedades diferente. En una de esas búsquedas frustantes oye un zumbido de mosca que revoletea alrededor de su cabeza, por lo que, sin mirar ni pestañear, alarga su kilométrica lengua succionadora y la engulle. A continuación eructa.
Lo que parecía un dulce tentempié hasta la hora de cenar resultó ser un trasmisor, una trampa propiedad de Rez, cibérnetico ser que habita entre las ondas electromagnéticas de la red mundial de televisión, diseñada para localizar y capturar a quien lo trague; poderoso en su medio, con el cebo en el objetivo, alarga su avariciosa mano a través del televisor de Gex y captura a su dueño (y al sofá, pero esto no lo necesitaba).
¿Su objetivo?, convertir al dicharachero lagarto en la mascota oficial de su nueva cadena de televisión, ya que llevaba mucho tiempo observándole puesto que no conocía a ningun otro espectador que permaneciera tantas horas enfrente de la pantalla. No estaría mal para él este honor sino fuera porque bañar en oro a la mascota para que reluzca más y resulte más atractiva es un serio inconveniente para seguir viviendo.