
Nintendo Switch
Análisis de Disney Illusion Island, un metroidvania ligero y encantador
Mickey Mouse protagoniza otra aventura de ilusiones, con elementos que vienen desde sus grandes éxitos de los 90.

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Desde Castle of Illusion (1990), Mickey Mouse ha protagonizado numerosas aventuras plataformeras en diversas consolas, empezando por el 2D, pasando por el 3D, el control táctil y ahora, en 2023, el metroidvania. Illusion Island atrapa una nueva faceta del famoso ratón, muy emparentada con su actual serie de animación, y que se aventura en una frontera desconocida para él. Este nuevo juego quizá no sea tan rompedor como otros fueron en su día, pero aprovecha sus posibilidades para aportar una nueva fórmula.
Una aventura de cuatro
Mickey, Minnie, Donald y Goofy protagonizan esta historia, una encantadora aventura en un mundo extraño habitado por misteriosos seres. Los personajes de Disney llegan a una isla donde muy pronto descubrirán que tienen que cooperar entre sí y convertirse en héroes. Encontrarán en su camino todo lo que esperamos de una divertida historieta de animación, momentos épicos, malvados que se cruzan en su camino, escenarios muy coloridos y muchos secretos por encontrar.

Illusion Island es más ambicioso de lo que parece a primera vista, porque se sale ligeramente del sobreexplotado guión metroidvania para ofrecer una aventura más original y con identidad propia. El principal motor de la aventura son las plataformas y los coleccionables, que nos sirven de guía para saber por dónde avanzar sin necesidad de acudir tanto al mapa; este detalle resta importancia al combate y la acción, pues la interacción con los enemigos es como en cualquier Super Mario en buena medida: nada de ataques con espadas o disparos, solo salta encima del enemigo para acabar con él. Esta jugabilidad, sencilla y accesible, toma mucha relevancia en las sensaciones que intenta transmitir el juego.
Aunque hoy en día encontramos muchos juegos de plataformas con mapeados grandes (como por ejemplo, Celeste), el enfoque de Illusion Island resulta refrescante y muy comprometido con sus raíces. A veces parece que estamos jugando a una versión modernizada de World of Illusion (Mega Drive), quizá la mejor aventura de Mickey Mouse, en especial por su enfoque multijugador. Hasta cuatro jugadores pueden participar a la vez en el juego, cada uno con un personaje. El diseño general está muy refinado para potenciar este modo cooperativo: la cámara está muy alejada y permite que todos los jugadores puedan encontrarse cómodamente, todos los niveles están pensados para que cada jugador los pueda superar en conjunto o por separado, e incluso con pequeños desvíos dentro de la misma pantalla para poder progresar a la vez.

Existen algunas mecánicas muy inteligentes que facilitan el juego cooperativo, pero lo hacen también muy gratificante. Cuando dos personajes están juntos y pulsan un botón a la vez, se dan un abrazo y obtienen un corazón extra de salud, un detalle muy entrañable y práctico para la aventura: cuando sufres daño, inmediatamente buscas a tu compañero de juego para que te ayude a recuperarte. También hay acciones cooperativas para superar los niveles, como poder desplegar una cuerda y permitir que otro jugador pueda escalar por ella, igual que en el clásico de Mega Drive; también hay un salto de potro coordinado que permite alcanzar más distancia. Illusion Island, en definitiva, es una experiencia multijugador extraordinaria, que sin grandes acrobacias, consigue ser igual de efectivo que otros grandes del género, como Cuphead o New Super Mario Bros. U, títulos también notables en su cooperativo.
Conforme progresa la aventura se aprenden nuevas habilidades que, como todo metroidvania, permiten acceder a zonas nuevas tanto principales como opcionales. No hay nada revolucionario: salto doble, planear por aire o dar un pisotón en el suelo son algunas de las cosas que permiten añadir un poco de complejidad a la aventura. Los escenarios se complican progresivamente, con más peligros y enemigos, pero nunca llega a ser tan exigente como Celeste o Super Mario Bros. Poder guardar el progreso cada poco tiempo también ayuda, gracias a varios checkpoints situados por todo el mapa. El principal motor que motiva la exploración es encontrar coleccionables, siempre escondidos tras algún pequeño desafío de plataformas opcional que es más difícil que el camino principal.

Conciliar la jugabilidad de plataformas clásica y el metroidvania es más difícil de lo que parece, y ahí Illusion Island tiende a desorientarse. El mapa es muy grande, quizá demasiado, y la jugabilidad trata de ser sencilla y accesible, con pocos elementos. La combinación de estos ingredientes provoca que se haga repetitivo con frecuencia. Hay demasiadas áreas muy parecidas entre sí, los mismos enemigos aparecen con mucha frecuencia y el progreso siempre nos exige solucionar tareas similares, como encontrar tres llaves para abrir una puerta que están por los alrededores. Mi experiencia con el juego es buena, siempre me apetece volver a él, pero no en sesiones largas por los motivos anteriores.
Los jugadores españoles encontrarán la curiosa circunstancia de que el juego está doblado al español latinoamericano. Aunque el doblaje es bueno, resulta sorprendente que un juego con la marca Disney haya escatimado en este aspecto. Por lo demás, la presentación del juego es llamativa, sigue muy de cerca a la serie de animación y destaca por sus colores y animaciones realizadas a mano. En lo personal prefiero el estilo artístico tradicional de Mickey, que sus anteriores juegos han explotado con mucha pericia, pero el que tenemos en Illusion Island tiene también mucho encanto. No faltan los guiños a la historia de Mickey Mouse, un detalle muy gratificante para los fans del personaje. Por supuesto, el pato Donald sigue siendo el más divertido de la cuadrilla.
Conclusiones
Este es un paso adelante en la trayectoria de la serie Illusion, con muchas virtudes para agradar a cualquier jugador. Es un juego accesible, vistoso y que multiplica su efecto cuando se disfruta en cooperativo. La experiencia se diluye un poco por un diseño de niveles que se vuelve repetitivo, un efecto colateral de fusionar un metroidvania con un plataformas tradicional; sin embargo, es un ejercicio notable de ofrecer una aventura con personalidad del ratón de Disney.
Una aventura de cuatro
Mickey, Minnie, Donald y Goofy protagonizan esta historia, una encantadora aventura en un mundo extraño habitado por misteriosos seres. Los personajes de Disney llegan a una isla donde muy pronto descubrirán que tienen que cooperar entre sí y convertirse en héroes. Encontrarán en su camino todo lo que esperamos de una divertida historieta de animación, momentos épicos, malvados que se cruzan en su camino, escenarios muy coloridos y muchos secretos por encontrar.


Illusion Island es más ambicioso de lo que parece a primera vista, porque se sale ligeramente del sobreexplotado guión metroidvania para ofrecer una aventura más original y con identidad propia. El principal motor de la aventura son las plataformas y los coleccionables, que nos sirven de guía para saber por dónde avanzar sin necesidad de acudir tanto al mapa; este detalle resta importancia al combate y la acción, pues la interacción con los enemigos es como en cualquier Super Mario en buena medida: nada de ataques con espadas o disparos, solo salta encima del enemigo para acabar con él. Esta jugabilidad, sencilla y accesible, toma mucha relevancia en las sensaciones que intenta transmitir el juego.
«A veces parece que estamos jugando a una versión modernizada de World of Illusion (Mega Drive), quizá la mejor aventura de Mickey Mouse»
Aunque hoy en día encontramos muchos juegos de plataformas con mapeados grandes (como por ejemplo, Celeste), el enfoque de Illusion Island resulta refrescante y muy comprometido con sus raíces. A veces parece que estamos jugando a una versión modernizada de World of Illusion (Mega Drive), quizá la mejor aventura de Mickey Mouse, en especial por su enfoque multijugador. Hasta cuatro jugadores pueden participar a la vez en el juego, cada uno con un personaje. El diseño general está muy refinado para potenciar este modo cooperativo: la cámara está muy alejada y permite que todos los jugadores puedan encontrarse cómodamente, todos los niveles están pensados para que cada jugador los pueda superar en conjunto o por separado, e incluso con pequeños desvíos dentro de la misma pantalla para poder progresar a la vez.


Existen algunas mecánicas muy inteligentes que facilitan el juego cooperativo, pero lo hacen también muy gratificante. Cuando dos personajes están juntos y pulsan un botón a la vez, se dan un abrazo y obtienen un corazón extra de salud, un detalle muy entrañable y práctico para la aventura: cuando sufres daño, inmediatamente buscas a tu compañero de juego para que te ayude a recuperarte. También hay acciones cooperativas para superar los niveles, como poder desplegar una cuerda y permitir que otro jugador pueda escalar por ella, igual que en el clásico de Mega Drive; también hay un salto de potro coordinado que permite alcanzar más distancia. Illusion Island, en definitiva, es una experiencia multijugador extraordinaria, que sin grandes acrobacias, consigue ser igual de efectivo que otros grandes del género, como Cuphead o New Super Mario Bros. U, títulos también notables en su cooperativo.
«Cuando dos personajes están juntos y pulsan un botón a la vez, se dan un abrazo y obtienen un corazón extra de salud»
Conforme progresa la aventura se aprenden nuevas habilidades que, como todo metroidvania, permiten acceder a zonas nuevas tanto principales como opcionales. No hay nada revolucionario: salto doble, planear por aire o dar un pisotón en el suelo son algunas de las cosas que permiten añadir un poco de complejidad a la aventura. Los escenarios se complican progresivamente, con más peligros y enemigos, pero nunca llega a ser tan exigente como Celeste o Super Mario Bros. Poder guardar el progreso cada poco tiempo también ayuda, gracias a varios checkpoints situados por todo el mapa. El principal motor que motiva la exploración es encontrar coleccionables, siempre escondidos tras algún pequeño desafío de plataformas opcional que es más difícil que el camino principal.


Conciliar la jugabilidad de plataformas clásica y el metroidvania es más difícil de lo que parece, y ahí Illusion Island tiende a desorientarse. El mapa es muy grande, quizá demasiado, y la jugabilidad trata de ser sencilla y accesible, con pocos elementos. La combinación de estos ingredientes provoca que se haga repetitivo con frecuencia. Hay demasiadas áreas muy parecidas entre sí, los mismos enemigos aparecen con mucha frecuencia y el progreso siempre nos exige solucionar tareas similares, como encontrar tres llaves para abrir una puerta que están por los alrededores. Mi experiencia con el juego es buena, siempre me apetece volver a él, pero no en sesiones largas por los motivos anteriores.
«Mi experiencia con el juego es buena, siempre me apetece volver a él, pero no en sesiones largas»
Los jugadores españoles encontrarán la curiosa circunstancia de que el juego está doblado al español latinoamericano. Aunque el doblaje es bueno, resulta sorprendente que un juego con la marca Disney haya escatimado en este aspecto. Por lo demás, la presentación del juego es llamativa, sigue muy de cerca a la serie de animación y destaca por sus colores y animaciones realizadas a mano. En lo personal prefiero el estilo artístico tradicional de Mickey, que sus anteriores juegos han explotado con mucha pericia, pero el que tenemos en Illusion Island tiene también mucho encanto. No faltan los guiños a la historia de Mickey Mouse, un detalle muy gratificante para los fans del personaje. Por supuesto, el pato Donald sigue siendo el más divertido de la cuadrilla.
Conclusiones
Este es un paso adelante en la trayectoria de la serie Illusion, con muchas virtudes para agradar a cualquier jugador. Es un juego accesible, vistoso y que multiplica su efecto cuando se disfruta en cooperativo. La experiencia se diluye un poco por un diseño de niveles que se vuelve repetitivo, un efecto colateral de fusionar un metroidvania con un plataformas tradicional; sin embargo, es un ejercicio notable de ofrecer una aventura con personalidad del ratón de Disney.
Jugado en Switch. Copia digital proporcionada por Nintendo
Alternativas
Ori and the Will of the Wisps, Celeste, Hollow Knight.
Cooperativo muy bien hilado. Jugabilidad fina y agradable.
Doblaje latino. Niveles demasiado grandes que se hacen repetitivos.
Interesante fusión de la estructura metroidvania con ideas de plataformas tradicionales, que saca todo el carisma del ratón de Disney.
Información del juego
Fecha de lanzamiento: 28 de julio de 2023
Desarrollado por:
Disney Interactive Studios
,
Dlala Studios